Ambiente

4/7/2013|1275

Pascua Lama, parada

Desocupación y accidentes fatales, la verdadera cara de la minería en San Juan

Mediante un comunicado emitido en Toronto, el viernes 28, Barrick anunció la postergación de la construcción de Pascua Lama -lo que implica, en los hechos, la suspensión del proyecto. El inicio de la producción previsto para el segundo semestre de 2014 pasó ahora para un incierto 2016, condicionado a que las autoridades chilenas le aprueben el plan de obras propuesto para evitar los graves daños ambientales del proyecto sobre los glaciares de la zona. Barrick anunció que esto le permitirá evitar inversiones en 2013 y 2014 por un total que oscila entre 1.500 y 1.800 millones de dólares.


De este modo, los más de 6.000 trabajadores directos actuales -y el pico que se esperaba para la primavera verano de más de 10.000-, quedarán reducidos a una dotación simbólica. Si sumamos los empleos indirectos, esto equivale a un tsunami social. Esta declaración confirma oficialmente lo que habíamos advertido (ver PO Nº 1.266, 2/5) y tendrá un efecto devastador en la economía sanjuanina y, más en general, en toda la zona cuyana, ya afectada duramente por la retirada de la brasileña Vale del proyecto de potasio en Mendoza.


Las ilusiones que funcionarios nacionales y provinciales -y especialmente la burocracia sindical (tanto de la Uocra como de Aoma-mineros)- habían sembrado en estos dos meses sobre la continuidad de la construcción del lado argentino quedaron pulverizadas por el anuncio. Las falsas expectativas sembradas por Barrick, cuando rescindió en mayo el contrato de Metalúrgica Haug (una empresa ligada al grupo Roggio), que ocupaba 1.500 trabajadores, argumentando que sus tareas iban a ser absorbidas por el principal contratista, la UTE Fluor-Techint, demostraron ser una cortina de humo. La prensa sanjuanina y Clarín (29/6) siguen destacando que Pascua Lama "continúa", ocultando lo sustancial: que el proyecto está congelado. A esto se suma que la caída del precio del oro también afectará el ritmo de ampliación de otras minas radicadas en San Juan, como Gualcamayo y Casposo.


Minería: crisis, chanchullos y "accidentes"


Barrick no solamente les mintió a los sanjuaninos. Acaba de recibir una demanda colectiva en nombre de todos los accionistas que compraron acciones "entre el 7 de mayo de 2009 y el 23 de mayo de 2013" (La Segunda, Santiago de Chile, 11/6). "La denuncia apunta a que Barrick ocultó que los costos requeridos para poner el proyecto en producción excedían significativamente lo estimado, que la expectativa de inicio de la producción en Pascua-Lama no correspondía a los plazos entregados públicamente por la firma, que el impacto ambiental del proyecto era más riesgoso de lo que se informó y que, por lo tanto, los demandados 'no contaban con una base razonable' para la proyección entregada en relación con el proyecto y la compañía". Es que, desde principios de año, cuando la acción cotizaba a 35 dólares, se derrumbó y la última semana de junio cayó debajo de 15 dólares.


Como señalábamos dos meses atrás, la minería está sufriendo los embates de la crisis mundial, con las noticias de caída de la demanda china en primer lugar. El cobre cayó a mínimos desde 2010 al igual que el oro -el que llegó a cotizar, la última semana de junio, por debajo de los 1.200 dólares la onza, cuando había llegado a tocar los 1.900 y parecía haberse estacionado en un rango de 1.600-1.700 dólares, poco meses atrás. Esto está afectando a los pulpos mineros, que apelan a maniobras y chanchullos de todo tipo. Vale, el gigante con base en Brasil, está también acusado de fraude fiscal por montos millonarios.


Las mineras suspenden proyectos en todo el mundo y esto afecta principalmente a Chile, donde se calcula que un 30% de los nuevos proyectos están en peligro (La Segunda, 28/6) y las exportaciones chilenas caerán unos 5.000 millones de dólares este año (La Tercera, 28/6).


La presión por bajar costos está provocando un incremento brutal de accidentes fatales en las minas sanjuaninas. El 17 de junio, un soldador sanjuanino de 35 años murió aplastado mientras realizaba tareas de mantenimiento en una perforadora en la mina Veladero (también propiedad de Barrick). Pocos días antes, había fallecido un trabajador de la mina subterránea de Gualcamayo. Carlos Cámpora (abogado de Aoma) se limitó a declarar "que están preocupados por los accidentes que han ocurrido en los emprendimientos y si bien es una actividad de alto riesgo, trabajar en seguridad es algo en lo que se debe hacer hincapié, y mucho, para evitar los eventos fatales" (El Huarpe, 18/6).


La parálisis y complicidad de ambas burocracias (Uocra y Aoma) facilitan la política depredadora de los pulpos mineros, con su secuela de desocupación y muerte.