“Todos rechazan la propuesta”

Cuando las cartas de Lenin llegaron a Petrogrado, la dirección del Partido Bolchevique organizó una reunión de urgencia de su Comité Central, en la noche del 15 de septiembre. Participaron 16 miembros, incluyendo dirigentes de Moscú y del Cáucaso que estaban en Petrogrado como delegados de la Conferencia Democrática. Todas las investigaciones históricas señalan que las actas de esa reunión se han conservado de un modo extremadamente fragmentario. Todas coinciden, en cualquier caso, en señalar que la reacción del Comité Central fue de rechazo a los planteos de Lenin. Bujarin, participante de la reunión, señaló años después: “La carta estaba escrita con enorme violencia y nos amenazaba con todo tipo de castigos. Quedamos suspensos. Nadie había planteado la cuestión hasta entonces tan violentamente… Al principio todos dudaban. Después de consultarse, se decidió. Fue quizás el único caso en la historia de nuestro partido en que el Comité Central decidió por unanimidad quemar la carta de Lenin”1.


Según el acta oficial, en efecto, el Comité Central votó conservar sólo una copia de cada carta y tomó medidas para evitar cualquier llamado a la acción. Sin embargo, la cuestión de la “unanimidad” es cuestionada por Trotsky, que también participó de la reunión. “Provocada por determinadas razones de carácter conspirativo”, dice en su Historia de la Revolución Rusa, “la incineración de varias copias de la carta peligrosa no se decidió en realidad por unanimidad, sino por seis votos contra cuatro y seis abstenciones. Por suerte, un ejemplar fue conservado para la historia. Pero lo que es cierto en el relato de Bujarin es que todos los miembros del Comité Central, aunque por motivos diversos, rechazaron la propuesta: unos se oponían a la insurrección en general, otros pensaban que el momento en que se celebraba la Conferencia era el menos favorable de todos; otros, simplemente, vacilaban y seguían a la expectativa”2.


 


Notas


1. León Trotsky, Historia de la Revolución Rusa.


2. Idem.