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22/8/2006|507

El Mercosur y el convenio Fiat-Smata en Parque Patricios

El 15/8, de un modo inusual, la patronal de Deca-Piazza convocó a todo el personal de la fábrica a una ‘asamblea’. Allí, un representante de la firma ‘explicó’ los objetivos de la empresa que… “todos deberíamos compartir como una familia”.



Planteó que había que estar unidos para competir con otras empresas del mercado (FV), alcanzar niveles óptimos de producción, calidad.



Recomendó desconocer al gremio (UOM) y desobedecer un eventual llamado a una huelga nacional; dijo que los despidos y las modificaciones introducidas en la producción se hicieron porque “había que hacerlo”.


La patronal está preocupada


Desde el cambio de firma, la ‘nueva’ patronal montó una feroz ofensiva contra los trabajadores, que desde entonces produjo alrededor de 80 despidos, incrementos infernales en los ritmos de producción, arbitrariedades de todo tipo, reemplazo de compañeros efectivos por contratados que apenas cobran 280 pesos por mes, régimen disciplinario carcelario, virtual anulación del Cuerpo de Delegados; en fin, como lo definió el PO en un volante: “La patronal impuso un clima de terror para aplicar la flexibilización a garrotazos”. Claro que para hacer todo esto, la patronal no convocó a ninguna “asamblea” para hablar de la “familia”.



Pero el 8/8, la fábrica paró masivamente, el ánimo de los compañeros se retempló, comenzó abiertamente la discusión de cómo organizarse para enfrentar a esta patronal negrera, y en fábrica ahora se discute que es necesaria una nueva HUELGA NACIONAL de 36 hs. y con movilización a Plaza de Mayo.


Respondamos los ‘argumentos’ patronales


“Para darnos un vale de 20 pesos tenemos que hacer una cola infernal, ¿de qué familia nos hablan?”.

 

Ahora, un compañero hace el trabajo que antes hacían 2 y con estos métodos, equipos enteros de compañeros han sido liquidados. Con todos estos ahorros, la patronal está montando una planta de cerámica en Pilar. ¿De qué ‘familia’ nos hablan?



¿Los trabajadores de Piazza tenemos que competir con nuestros compañeros de FV? No, tenemos que unirnos a nuestros hermanos de clase para enfrentar estos planes de flexibilización y reclamar juntos la convocatoria a paritarias nacionales para poner en pie el gremio, con delegados electos en asambleas de todas las plantas. Esto sí es una familia.



¿Desconocer la UOM y carnerear una nueva Huelga para que los patrones de Deca-Piazza nos sigan rompiendo la cabeza? No. Fortalecer nuestra organización y prepararnos para impulsar con mayor firmezas las luchas que se avecinan y para que los patrones de Deca pongan sus barbas en remojo.



“Ladran, Sancho, señal que cabalgamos”.