Monsanto (Córdoba)

“EL APOYO DEL FIT Y DEL PO HA PERMITIDO SOSTENER ESTA LUCHA”

Entrevista a Eduardo Quispe (45), de Malvinas Argentinas, Córdoba

— ¿Cuál es la lucha que traen al Congreso del Movimiento Obrero y la Izquierda?

—Vengo de Córdoba, de Malvinas Argentinas. Venimos hace dos años resistiendo la instalación de la multinacional Monsanto. Nos organizamos en un grupo que se llama “Malvinas Lucha por la Vida” y ahí con el conjunto de las organizaciones y algunos partidos de izquierda,  fundamentalmente el apoyo del Frente  de Izquierda y el PO,  hemos podido sostener y visibilizar la lucha; esta lucha que es desigual  y que mantienen los pueblos oprimidos no sería posible sin el acompañamiento no tan solo de los actores sociales, sino el compromiso que han mantenido las fuerzas políticas, sobre todo el Frente de Izquierda.

¿Qué conclusiones te llevas de este congreso?



—Uno viene con mucha expectativa; a veces cree que el problema  solamente pasa por una comunidad tan pobre y chiquita como es Malvinas, pero cuando uno llega acá se da cuenta que el escenario de Malvinas se transforma en una gran metamorfosis y que esta cuestión social se multiplica en múltiples sectores de todo el país; hay un problema social, una cuestión social latente y la solución y la salida es por izquierda.

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“A LA LARGA EL CAPITALISMO ES EL PROBLEMA”

Entrevista a María Reymundo Luna (60), referente del Mocase en Santiago del Estero.

¿Cuál es la lucha que traen al Congreso del movimiento Obrero y la Izquierda?



—Principalmente tratando de encontrar algo que haga que los trabajadores lleguemos al poder. El peronismo fue la herramienta revolucionaria del movimiento nacional mientras vivió Evita. Muerta ella, Perón y los que lo sucedieron sumaron la derecha al movimiento nacional y así nos fue. El hecho de juntarnos con los compañeros del Partido Obrero y del Frente de Izquierda ha hecho que demos un impulso nuevo a la cuestión. La realidad en estos últimos cincuenta años sigue siendo la misma, uno u otro siguen en lo mismo, y a la larga el capitalismo es el problema: no se logra que se distribuya genuinamente la riqueza del país como corresponde y los resortes de la economía están manejados por las corporaciones que siempre lo han hecho. Entonces, para que eso se termine hace falta un gobierno revolucionario —con un movimiento revolucionario que lo sostenga— porque eso va a tener la autoridad suficiente para hacer lo que hay que hacer en este país.

¿Cómo está la situación de lucha en el Mocase?

—El Mocase está muy cooptado tanto por el gobierno de la Nación como por el de la Provincia; creo que los campesinos mayoritariamente no logran entender que hace falta una opción distinta. Dentro del movimiento campesino obviamente  hay varias vertientes que tienen sus diferencias; de todas maneras estamos en una línea independiente, hemos estado siempre cerca de la izquierda, y el hecho de haberlo oficializado en este último tiempo nos da la posibilidad de pegar ese salto que nos permita ser independientes. 

¿Cómo recibieron el comienzo del juicio por Cristian Ferreyra?

—El martes ha empezado y es un hecho histórico; la presión social que hemos ejercido a la largo de este tiempo ha llevado a esto y entiendo que va a terminar de la mejor manera. Hemos sí denunciado públicamente el hecho de que circulan rumores que el empresario va a ser absuelto y que la vía campesina no sería aceptada como querellante. A su vez, hay otras cuestiones como los casos de desalojo, como el que ocurre en el departamento de Pellegrini que denunciamos en esta comisión, y por el cual pedimos la solidaridad. Como ese caso hay muchos otros en la Provincia.

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“VENIMOS PARA SACAR CONCLUSIONES E IMPLEMENTARLAS”

Entrevista a Pedro Eduardo Torres  (36), vecino de Andalgalá, Catamarca, luchador por el medio ambiente.

—Venimos del departamento de Andalgalá, en el interior de Catamarca, donde se desarrolla una lucha muy grande por la instalación de la minera La Alumbrera desde hace veinte años; en la actualidad es una empresa que trabaja las 24 horas y a raíz de esto ha producido un impacto ambiental muy grande en la parte de bosques, de ríos, lo que llamamos el ecosistema. Hemos planteado una lucha muy grande apoyada siempre en las asambleas que en su momento ha sido muy interesante  y que luego tomó una dirección equivocada por un factor político, donde el intendente terminó cooptando la asamblea. Hoy está en un impasse, en una caída y venimos a este Congreso a ver qué podemos sacar para llevarlo e implementarlo en la lucha Por ejemplo,  las enfermedades del caso de cáncer son muy graves, en una cuadra redonda existen de dos a tres casos, de distintos cáncer, mayormente por la polución. Existe otra mina que se llama Bajo El Durazno (otro yacimiento que se está por explotar), que el gobierno entregó por chaucha y palitos. También quieren explotar una mina que se llama Agua Rica, que está a 17 km del casco céntrico de Andalgalá, donde tenemos los nacientes del agua que consumimos, o sea que sería un desastre. Y tampoco se cumple la Ley de Glaciares, todo un verso, donde el gobierno anterior del Frente Cívico y Social radical y el actual del gobierno K de Lucía Corpacci han hecho todo en favor de las grandes corporaciones. Venimos a este Congreso, con los compañeros de la asamblea, para sacar conclusiones y llevarlas para que podamos implementarla y que nos sirva. Finalmente, en conjunto con el Frente de Izquierda, queremos presentar una ley que por supuesto va a tener mucho eco: la izquierda viene con un gran crecimiento y no hay otro partido u oposición que lo pueda presentar que no sea el Partido Obrero. 

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“ACA HE ENCONTRADO GENTE QUE VA A DAR TODO POR ESTA LUCHA”

Entrevista a María Elva Ledesma (50), vecina de Tucumán, querellante en una causa contra la SAT, Sociedad de Agua de Tucumán

—Agradezco porque desde el Partido Obrero son la gente que nos apoya para pedir justicia; ¿cómo van a decir los jueces de Falta (del Juzgado Federal de San Miguel de Tucumán) que los afluentes cloacales no contaminan? Porque cuando empezamos este juicio nos salían afluentes cloacales por las canillas. Debido a esa denuncia como querellante presenté pruebas con testigos que todos los partidos políticos me mandaron a amenazar. A un familiar le dijeron que a mí me iban a encontrar tirada en un canal y ahí lo hago responsable directamente a José Alperovich. Él le miente al pueblo ya que dice que le da agua y no tenemos agua; le miente al pueblo diciéndole que está todo bien y todavía seguimos pisando, todos los tucumanos, materia fecal. En ese juzgado federal yo he sido perseguida, me hicieron una causa, me sacaron detenida como una delincuente peligrosa por no querer tomar agua con materia fecal. La Cámara de Diputados hizo un repudio por la persecución hacia mi persona.

-¿Qué conclusiones obtuviste de los debates en la Comisión?

–  Acá he podido encontrar gente que se ha acercado a solidarizarse por la lucha y a decir que van a dar todo su apoyo a esta lucha para que se sepa la verdad. Esto ha hecho que todos sepan lo que está pasando en Tucumán porque somos contaminados por afluentes cloacales; somos contaminados con las fumigaciones, los basurales, y siempre se lo humilla al pobre. El gobierno ha empobrecido a la gente y cada vez hay más asentamientos y encima los contaminan. Porque es en los lugares donde hacen esos asentamientos, en los barrios pobres, donde ponen las plantas de tratamiento, los basurales, los quemadores de residuos; perjudican a los barrios pobres, a ellos los humillan y les quitan la dignidad.

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“ESTO FUE UNA REVOLUCION DE INQUILINOS”

Entrevista a Grecia G. (25), vecina de la Villa 20 Papa Francisco

-Cuando hay debate en la Comisión de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires Marcelo Ramal siempre trata de instalar el tema del barrio Papa Francisco. Lo que pasó en la Villa 20 fue un levamiento de inquilinos. La toma de tierra, por ley, le pertenece a la Villa 20 y los grandes usurpadores de esa toma de tierra es la Policía Federal. Esto fue una revolución de inquilinos y de gente joven que no tiene donde vivir o pagar un alquiler fuera de la villa porque no tiene garantía o el depósito mínimo; y entonces lo que hace es una revolución al tomar estas tierras que en realidad no es ilegal ya que pertenecen a la Villa 20 por ley.