¿Altamira se olvidó de Trotsky?

Compañeros:


Espero que esta carta permita una pequeña rcflexión sobre lo que Altamira ha planteado parlamento  burgués, y ojala que llegue a sus manos.


He leído lo forma tardía —por mi estado de salud- la Prensa Obrera   que un compañero  residente  es Brasil me envió, y me ha sorprendido leer en la PO N°682 el discurso de Jorge Altamira con relación a la conmemoración del Golpe de Estado en Chile en 1973.


En verdad considero que las expresiones de Altamira debieron dar mucho que hablar al interior de las bases del Partido Obrero, y si esto no ha sucedido creo que el deber de los revolucionarios es debatir sobre este punto.


Creo que el “homenaje” que Altamira brindo a Salvador Allende debe ser profundizado. Para los revolucionarios, el gobierno frentepopulista y, por tanto, de carácter contrarrevolucionario; ¿o acaso a Altamira se le olvidaron las experiencias de Francia y España y los análisis de Trotsky en torno a los frentes de Trotsky en torno a los frentes populares?


Altamira rinde honor a Allende porque en el último momento “tomó el ffusil” y peleó por lo “que creyó” en el socialismo.


Esto queda claro cuando vemos que bajo su gobierno se aplicó la ley de control de armas (Ley Carmona) y que autorizó a los militares a buscar “armas” en las sedes de los sindicatos; al mismo tiempo, nombró ministro del Interior a Carlos Prats (comandante en Jefe del Ejército basta su renuncia pocos meses antas del golpe). Prats, como ministro, cumplió con la tarea de regresar a sus “verdaderos dueños” (la burguesía) las empresas expropiadas por los trabajadores, como respuesta al paro patronal.


Así vemos un ejemplo de las “creencias” de Allende; por esto Allende no murió defendiendo a la ciase obrera ni el socialismo, murió defendiendo la “democracia burguesa”, o sea el régimen de una clase social que hasta hoy somete a ios trabajadores a la explotación. Allende murió defendiendo el puesto que la burguesía y el stali-nismo le reservaron y no quiso entender que cuando la burguesía se dio cuenta de que ya no servia (para mantener en línea a los trabajadores) los echó a patadas.


Por estas razones antes señaladas (y muchas otras) Allende no merece ningún tipo de homenaje de parte de un representante obrero. Les que merecen homenajes son los 20 mil ejecutados por la dictadura, los más de 5.000 detenidos desaparecidos, los miles de torturados, los exiliados y la clase obrera chilena que hasta hoy sigue soportando el peso de la explota ción que ha perdurado producto de la política traidora de la UP (Allende), de Los stalinistas y la centro-izquierda y la socialdemocracia de todo calibre.


Para terminar quiero transcribir parte de la certa da la “Coordinadora de cordones a Salvador Allende”… con fecha 5 de septiem bre de 1973; “1e advertimos compañero, que con el respeto y la confianza que aun le tenemos, si no se

cumple con el programa de la Unidad Popular, si no se confia en las masas, perderá el único apoyo real que tiene como persona y gobernante y que será responsable de llevar al país, no a una guerra civil, que ya está en pleno desarrollo, sino a la masacre fría, planificada, de la clase obrera más con-ciente y organizada de Latinoamérica: Y que será responsabilidad histórica de este Gobierno, llevado al poder y mantenido con tanto sacrificio por los trabajadores, pobladores, campesinos, estudiantes, intelectuales, profesionales, a la destrucción y descabezamiento, quizás a qué plazo, y a qué costa sangriento, de no sólo el proceso revolucionario chileno, sino también el de todos los pueblos latinoamericanos que están luchando por el socialismo. Le hacemos este llamado urgente, compañero Presidente, porque creemos que esta es la última posibilidad de evitar en conjunto la pérdida de la vida de miles y miles de lo mejor de la clase obrera chilena y latinoamericana”.


Como podemos concluir, antes de andar rindiendo homenajes a servidores de la burguesía el compañero Altamira debe estar claro en que Allende no prestó ningún interés a esta carta ni a los intereses de la clase obrera, lo que lo hace directo responsable de la matanza sucedida en Chile. Y por último fue el propio Allende el que nombró Comandante en Jefe al “carnicero” de Pinochet.


Por todo lo señalado, como revolucionario intemacionalista y como hijo de la clase obrera chilena exija una aclaración.