¿China o Argentina?

Estuve recién viendo dos noticieros yanquis. Uno, el de CNN, mostraba la apertura de los Juegos Olímpicos a realizarse en Beijing, la capital china.


Destacaba la opulencia de China, los buenos augurios de sus dirigentes, la paz y fraternidad que deseaba para sus países vecinos, ante un “público” de 10.000 personas. Un “público” no tan público, ya que sólo había invitados. El público (sin comillas) estaba en otra parte. Ciertamente, en el otro canal.


Allí mostraban a los habitantes "no deseados" de Beijing. Bueno, a los ex habitantes, ya que el gobierno había expropiado a 50.000.000 de habitantes de sus casas, dejando en la ciudad a sólo los 2.000.000 de habitantes deseables, es decir, a los más adinerados. Al resto, les compró sus casas con la intención de "reacondicionar" la ciudad, edificando grandes edificios lujosos para mostrar al resto del mundo lo "bien" que están en China.


Con el dinero recibido, la gente "no deseable" sólo pudo alquilar y en el mejor de los casos comprar un departamento pequeño en una torre a dos horas de la ciudad.


Muchos de ellos son vendedores ambulantes, que tienen que viajar dos horas para poder seguir vendiendo sus productos para "llegar apenas a fin de mes", según sus propias palabras. Mostraban también gente que tiene comercios en Beijing que no estaban muy contentas con el cambio. Una mujer decía que tenía a su madre de 95 años postrada en la cama y que ahora estaba a dos horas del hospital más cercano.


Es decir, que mientras un dirigente habla de progreso y de bienestar, otros "venden contra su voluntad" sus casas y algunos aprovechan la boleada haciendo cursos de inglés rápido para dedicarse a guías de turismo.


Cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.