El fútbol argentino sigue en crisis. Para el común de las personas, en el imaginario social, sus recursos, dados por el gobierno, fueron dilapidados e incluso robados. Jugadores y entrenadores opinan que “todos quieren tener una parte de la torta”. 

 

No es bueno, para hinchas y jugadores, esta paralización. ¿Razones? Muchos clubes ya están trabajando en los tiempos estipulados y previstos desde el primer momento: pretemporadas, amistosos, etc. Al no arrancar la competencia oficial, se genera una situación de incertidumbre. 

 

De lo planificado, se pasa al “trabajando día a día” a la espera de decisiones. Para un conjunto de clubes es necesario, ahora, una salida transitoria y coyuntural. ¿En qué consiste? Que se resuelva jugar el semestre, mientras se toman decisiones. 

 

El otro bloque, el gubernamental, tiene como premisa avanzar en la rescisión del vínculo con el Estado por el programa "Fútbol para Todos", en el que se estatizaron las transmisiones de los partidos, y que rige hasta setiembre de 2019. 

 

La salida de este contrato es la condición necesaria para poder firmar con algunos de los interesados en invertir en el futbol argentino: Fox/Turner y EXPN. Esta postura significa que no habrá un peso para los clubes. Las dos empresas estadounidenses ofertan 2.700 millones para los clubes y un ingreso variable, que dependerá de los nuevos abonados del sistema de cable y del rating de las transmisiones, cercano a los 500 millones. 

 

La condición, de ambas, es que extinga el contrato de Futbol para Todos. Mientras tanto, los clubes deben ponerse de acuerdo para salir del convenio. Cuestión donde está radicado el nudo de la crisis. Para ello, es necesario llamar a una asamblea, con el fin de cancelar el contrato de TV con el gobierno. 

 

Se contaría con el apoyo de la mayoría de los clubes de primera. Para asegurar los acuerdos, FOX y Turner, adelantarían $1.000 millones, más los 530 millones por la rescisión del contrato, donde la AFA recibiría $1.530 millones por los partidos del primer semestre 2017. Se debe agregar 280 millones, de los canales, a cambio de los derechos de partidos, que pagarán por mitades. Y finalmente otros 40 millones correspondiente al segundo semestre del contrato de Axion Energy, como sponsor principal del torneo. 

 

¿Las consecuencias? La TV del futbol volverá a ser Premium: habrá que pagar para ver los partidos más atrayentes. Y el torneo, primero en arrancar, sería la Superliga, en agosto, y el último torneo de transición pasaría a febrero-diciembre. 

 

En este cuadro, hay dos cuestiones a resolver: la reforma del estatuto de la AFA y la asamblea para elegir a su próximo presidente, incluido la cantidad de representantes del ascenso y del futbol del interior. La FIFA, puso como condición que las elecciones deben realizarse con el estatuto reformado. Pero el hincha no fue consultado. Los únicos consultados, en este proceso, fueron empresas y dirigentes. El hincha, el que va a la cancha y participa de este deporte, hasta el momento, no fue interrogado sobre su postura.