Del factor subjetivo al consciente colectivo

El papel subjetivo de un partido revolucionario, con su agitación sobre las masas, sus caracterizaciones políticas, como así también por sus métodos, juega un rol fundamental preparando las luchas obreras.



Esto estuvo presente en el último corte de la Panamericana, protagonizado por los obreros de la Ford. Con el recuerdo de los obreros de la Ford que en el `96 se colgaban del alambrado mirando cómo cortábamos la Pana, o durante los cortes realizados por los obreros de Atlántida, o durante los despidos masivos en los ‘90, cuando más de 1.000 compañeros fueron rajados por la patronal, con la colaboración de la burocracia del Smata. Cómo olvidar cuando nos trenzamos con más de 80 burócratas en la puerta de la fábrica el día que se realizaba una asamblea para decidir si se aceptaba la propuesta de la patronal y de la burocracia de las suspensiones por 12 meses (despidos encubiertos). Allí estuvo el partido con un volante llamando a rechazar los despidos y a votar un plan de lucha para frenar a la patronal. Entre las trompadas y los palazos volanteamos hasta el último volante, no pudiendo los burócratas impedir que nuestra posición llegara a la asamblea.



Por último, cuánto habrán influenciado los más de 6 cortes en la Panamericana del movimiento piquetero de la zona norte. Lo de Ford no fue un corte espontáneo, sin influencias anteriores; los militantes del Partido Obrero sabemos que no es así.



Sabemos, sin querer atribuirnos las luchas del conjunto de los trabajadores, el papel que juega un partido revolucionario.