Saludos a Prensa Obrera,

Soy María Eugenia Parra; intenté co­municarme hacía tiempo con ustedes, pe­ro se perdió la comunicación y hoy creo que es necesario volverla a establecer.

Vivo en el Ecuador, donde no sé si se escuchó, pero el viernes pasado los indí­genas tomaron el Congreso Nacional, ya que estaban en contra del proceso dolarizador al que nos quieren someter. Ellos protestaban porque son la clase social históricamente más oprimida, y es a ellos a quienes más perjudica este proceso.

Todo se vio fraguado de antemano, se obtuvo el apoyo de pocos militares pro­gresistas, el coronel Lucio Gutiérrez principalmente, y a diferencia de la mo­vilización que derrocó a Bucaram, esta movilización fue libre de políticos y elites interesadas; al principio se proponía un cambio radical del sistema mediante la postura de un triunvirato, y la posterior erradicación del Congreso, pero conforme pasaron las horas la situación se fue en­tibiando y el objetivo final fue el presi­dente Jamil Mahuad, el cual acaba de ce­sar en sus funciones.

Tuvimos el orgullo de ser los primeros en Latinoamérica, que ven a los indíge­nas en el Poder, sin embargo, toda esta confabulación provocó que se formara una contrarrevolución apoyada por sec­tores de derecha, que se ganaron gran parte de la prensa mundial; el presiden­te Mahuad quedó como héroe, los milita­res progresistas serán llevados a juicios de guerra, el Congreso se restableció an­te el anuncio internacional de que una salida no constitucional nos costaría en términos de comercio exterior.

Actualmente, el ex vicepresidente Gustavo Noboa es el actual mandatario; el proceso de dolarización va, con el aplauso internacional de medios de pren­sa que no informaron como es debido; los indígenas tuvieron que retirarse, ya que la presión internacional logró obtener presión dentro del país, y de esa forma destruir todos los ideales.

Sólo quería escribirles, porque creo que es necesario que una prensa justa describa con justicia los hechos, y consta­te ante la prensa internacional que los despectivamente tratados indios, tenían razón.

Agradeciendo su atención me despido esperando respuesta.

Atentamente