A la quiebra fraudulenta del Sanatorio Finochietto se agrega el Sanatorio Parque, que ha cerrado sus puertas dejando en la calle un tendal de trabajadores.

Es parte del proceso de copamiento de las obras sociales sindicales. por parte de capitales extranjeros.

La directiva de West Ocampo en el sindicato de la Sanidad apoya este proceso monopolizador . En el caso del Sanatorio Parque reclama la aplicación del “procedimiento preventivo de crisis de empresa”, lo que autorizaría a la patronal  a reducir el salario, borrar las conquistas del convenio y despedir  pagando sólo el 50% de indemnización.

En el caso de la Finochietto, los delegados burocráticos venían negociando con la patronal un procedimiento similar.

Una asamblea los destituyó y nombró nuevos delegados que decidieron adherir a la CTA. El Ministerio de Trabajo y  ATSA los desconocen y exigen “suspender a todo el personal por 60 días sin goce de sueldo a partir del 1º de agosto con la finalidad de intentar una venta de la empresa en funcionamiento”, mientras se solicita a los representantes gremiales que “confeccionen un listado individual y firmado por cada uno de los empleados de la clínica en el que se manifiesta directamente la opinión de cada uno de ellos respecto de si continuarían trabajando en la clínica” (con un nuevo empleador).

El conflicto de la Finochietto (cuya sede está ocupada por los trabajadores), está empantanado desde hace dos meses a  la espera de las negociaciones en sede judicial.

El Sanatorio Parque es casi el único centro asistencial de Pompeya, Soldati y Lugano. El Finochietto es un centro altamente calificado. La patronal del Parque ha pedido la intervención de los “organismos nacionales, municipales y de la salud, obras sociales, etc., tendientes a lograr acuerdos que permitan una pronta reapertura del sanatorio”.

Pero de lo que se trata no es de subsidiar a estas empresas, sino que el Municipio se haga cargo de las mismas, convirtiéndolas en centros gratuitos de atención a la población.