Opinan nuestros lectores

“Murió un crispador social, nace un rockstar”

Lucas: tu nota me pareció brillante, porque explica pedagógicamente toda la operación mediática que están haciendo para transformar a NK en un mito. El encabezado de la tapa del Nº 199 de la revista Barcelona dice: “Murió un crispador social, nace un rockstar”. Marchetti, creo que es el mayor exponente de los escribas oficialistas porque llega hasta los límites de la acidez como método de argumentación, buscando artificialmente vestir a NK con el ropaje de héroe popular. Pero el punto, acá, es que el encabezado que acabo de citar es totalmente cierto. La estrategia política del kirchenrismo desde el conflicto agrario fue la de buscar una polarización social entre dos polos artificalmente creados (por eso lo de crispador) y ahora, con su muerte, se parecería a la muerte de un rockstar. Onda Jim Morrison, que luego de su muerte pasó a conformarse en todo un mito. Pero los mitos, necesariamente, tienen que venir desde las capas populares, no pueden estar metidos a la fuerza a través de operaciones mediáticas.

Otra operación, que ya venía desde antes de la muerte de Kirchner, era vestirlo con la ropa del Eternauta. En la historieta, el Eternauta lucha contra los invasores llamados “Ellos”. Oesterheld, asesinado por la dictadura, buscó entonces retratar la lucha de “Nosotros” contra “Ellos” que se vivía por entonces. Polarizaba el conflicto social. Con el asesinato de Mariano Ferreyra, salió a la luz algo que nosotros veníamos diciendo hace tiempo, que es la ligazón de la burocracia sindical con el aparato represivo del Estado. Kirchner, como representante de este Estado, vestido de Eternauta, es parte de la confusión a la que nos quieren llevar. Porque el Eternauta de aquel entonces peleaba contra los “Ellos”, que ahora se han transformado en los “Nosotros” de este gobierno. La Juventud Sindical era parte de los “Ellos”, ahora es parte del “Nosotros”.

El kirchnerismo es la farsa, de eso no quedan dudas.

Nacho (Económicas)

 

La nota sobre la situación en Sahara

Es muy buena. Es un mérito político hacer un análisis tan diáfano de un conflicto tergiversado por la prensa oficial (como todo lo que ocurre en Africa) y geográficamente tan lejano para nosotros.

Martín