Por un Gran Partido Obrero de Masas

La nueva Comisión Interna de Faplac S.A., elegida por sus trabajadores en genuinos y legítimos comicios convocados por el gremio del Plástico el 14/10/96 (cuyo resultado fue el siguiente: lista Naranja, 45 votos; Azul y Blanca, 18), hace llegar al Partido Obrero nuestros más sinceros respetos y reconocimiento hacia un partido que trabaja, lucha y organiza en pos de la unidad de la clase trabajadora. Para presentar la lista, hemos tenido que sortear diferentes obstáculos: por un lado, el sindicato, que no accedía a dicha presentación; por el otro, la patronal, que nos impugna como lista y tampoco nos reconoce como la nueva interna; de hecho, la sola presentación de la Naranja en las elecciones para elegir delegados es un gran triunfo de los trabajadores, de enorme importancia, que se vio plasmado con el resultado final de las elecciones. Porque tener que enfrentar a órganos poderosos como lo son el Estado, la patronal y el sindicato y, por sobre todas las cosas, salir airosos, marca la política que tenemos que manejar y seguir los trabajadores para enfrentar a la otra política del capitalismo, o sea, la del sometimiento, represión y marginación. Que quede muy claro que de no haber tenido la orientación de un partido netamente clasista como lo es el Partido Obrero y las permanentes discusiones en equipo sobre una línea de trabajo y estrategia política a seguir, muy probablemente se hubiera fracasado en el objetivo final. Ya dimos el puntapié inicial, ahora queda lo más duro: jugar el partido, o sea luchar y organizar con más ahínco y perseverancia que nunca, para que no nos sigan imponiendo leyes antiobreras y quitando logros y conquistas sociales por las cuales nuestros padres y/o abuelos han ofrendado sus vidas.


Rindámosle homenaje a esos mártires, hagamos honor a nuestros apellidos luchando con hidalguía por todas nuestras reivindicaciones, y tomemos como ejemplos el Santiagueñazo, el Cutralcazo, el Cordobazo educativo, los trabajadores de Transporte del Oeste, etcétera, que nos marcan bien a la claras cuál es el camino que tenemos que seguir los trabajadores, y hagamos nuestras las consignas del Partido Obrero. Fuera Menem y todas las políticas capitalistas. Por un gran Congreso de bases de organizaciones obreras, desocupados, activistas y trabajadores, que resuelva un plan económico y político de los trabajadores. Estamos en una etapa decisiva en la  historia política de este país, venga a las reuniones del PO, escuche, analice y debata con nosotros para que juntos construyamos un “Gran Partido Obrero de masas”. Solamente nosotros, los trabajadores, podemos cambiar el rumbo y la historia política de este país; está en nosotros legarles un futuro mejor a nuestros hijos y nietos. Desde que existen las clases sociales, el trabajador ha tenido que luchar por sus derechos; y en base a que hoy nuestros dirigentes gremiales totalmente burocratizados aíslan y traicionan las luchas, estamos perdiendo día a día todas las conquistas sociales que nos legaron nuestros mayores. Hay que luchar por una clase trabajadora independiente políticamente de los partidos patronales, y lo más elemental y fundamental de todo: hay que echar de la casa de los trabajadores, o sea de los sindicatos, a la burocracia sindical; con ellos no hay salida ni existen probabilidades de victoria alguna por ser traidores, corruptos, cómplices de un gobierno antiobrero y agentes directos de una clase social superexplotadora, represora y criminal. Por todo esto y mucho más, construyamos un gran partido de los trabajadores, para los trabajadores, y con los trabajadores como dirigentes.