Sin que haya todavía asumido, el triunfo del ultraderechista Jair Bolsonaro en las presidenciales y el peso de su mano en la justicia brasileña ya se ha hecho sentir en numerosas avanzadas antidemocráticas, entre ellas los allanamientos contra universidades y sindicatos donde hubo clases y protestas contra el fascismo.

En este marco, la jueza Ida Inés del Cid prohibió la realización de un concierto del reconocido músico Caetano Veloso el día de ayer, que iba a tener lugar en un terreno de São Bernardo do Campo (en el estado de São Paulo) que ocupan más de 6 mil familias y encabeza el Movimiento de Trabajadores Sin Techo, en apoyo a su lucha por vivienda (Bolsonaro ha afirmado que tomas como estas serían calificadas como “terrorismo”). Junto a ello, el alcalde del municipio, Orlando Morando (del derechista PSDB) dispuso un embargo contra el concierto.

Sostenida en una supuesta “ausencia de estructura para albergar el evento”, la resolución judicial aparece luego de las sistemáticas denuncia del músico contra el flamante presidente del Partido Social Liberal y de su llamado a votar al candidato del PT, Fernando Haddad (aunque ha criticado el involucramiento de figuras petistas en casos de corrupción y en elecciones previas, como las del 2010 y 2014, expresó su preferencia por Marina Silva). En un artículo que escribió para el New York Times del 24 de octubre, Veloso señaló que “si Bolsonaro gana la elección, los brasileños pueden esperar una oleada de terror y odio”. Dos días después de su victoria en segunda vuelta, Veloso citó en un tweet unos versos de la canción de Gal Costa “Divino Maravilhoso”: “Atención al refrán: Hay que estar atentos y fuertes, no tenemos tiempo de temer la muerte”.

Atenção. Tudo é perigoso. Tudo é divino maravilhoso. Atenção para o refrão: É preciso estar atento e forte, não temos tempo de temer a morte. | “Divino Maravilhoso” na minha playlist #Política, disponível no @spotify https://t.co/AG2GCkU989 pic.twitter.com/qV2AzHoRMG

— Caetano Veloso (@caetanoveloso) 30 de octubre de 2018

 

 

Tras la decisión de la magistrada, bajo amenaza de multa de 500.000 reales (unos 150 mil dólares) e intervención policial en caso de que se hiciese el concierto, Veloso denunció que era “la primera vez que estoy impedido de cantar” desde los tiempos de la dictadura y añadió “Me siento mal, da la impresión que no es un ambiente propiamente democrático. Es un modo de reprimir una acción que sería legítima” (CubaDebate, 6/11). De igual manera se hizo presente en el terreno paulista junto a otros artistas, y la productora señaló que el concierto será reagendado.

Creadoras y creadores de Brasil y del mundo han expresado fuertes críticas al ex militar devenido en mandatario. Ya en las horas posteriores a la primera vuelta, el maestro nacional de capoeira Moa do Katende fue asesinado por un bolsonarista, un crimen que conmovió al ambiente artístico: Caetano mismo le dedicó la canción Maestro Moa, que finaliza diciendo “nosotros seremos su voz, sus piernas, sus manos, venceremos a su verdugo”.

 

En su gira por Brasil, el ex líder de Pink Floyd Roger Waters calificó a Bolsonaro y Donald Trump de “neofascistas”, críticas que mantuvo pese a la amenaza de ser encarcelado. También se expresaron en este sentido figuras destacadas como Chico Buarque, Gilberto Gil, Daniela Mercury, Pabllo Vittar, Bruna Linzmeyer y, fronteras afuera, Madonna, Dua Lipa y Dan Reynolds, entre muchas otras.