Cultura

21/7/2005|909

Catamarca: No aceptamos lo habitual como una cosa natural

Siguiendo el énfasis que pone Bertolt Brecht en su pieza La excepción y la regla, los grupos de teatro independiente de Catamarca decidieron organizarse bajo los siguientes objetivos:


• Defender los intereses y derechos de los trabajadores de teatro independiente.


• Fiscalizar, bajo el control de los trabajadores, el presupuesto del Instituto Nacional del Teatro destinado a Catamarca.


• Promover, alentar, difundir y fomentar la actividad cultural, artística y educativa de las artes escénicas para todos los estudiantes de teatro y trabajadores independientes residentes en la provincia.


• Proveer las herramientas y medios para el desarrollo de la actividad teatral en el campo popular.


• Defender las escuelas públicas y gratuitas de arte nacional y provinciales y sus lugares genuinos de pertenencia.


• Exigir al INT becas, subsidios para los estudiantes de teatro y los trabajadores independientes.


La Asamblea que dio fin a la prolongada manipulación de la delegación provincial del INT se pronunció a favor de los objetivos antes mencionados y llevó a cabo acciones de fiscalización y seguimiento de la gestión burocrática y elitista del representante provincial. La conformación definitiva de la Asociación de Teatristas catamarqueños consiguió, a través de la organización, que el material bibliográfico sea repartido igualitariamente para todos los grupos independientes, como así también el relevamiento del equipamiento técnico (iluminación y sonido) que “dormía” en depósitos de la Municipalidad y era utilizado sólo en beneficio de las actividades que ésta promovía.


La reivindicación más importante fue, en una primera instancia, quitarle al INT la dirección que pretendía imponer sobre todos los intentos de conformación de una Asociación de Teatristas.


En una de las asambleas, una comitiva de “cortesanos” encabezada por Oscar Nemeth, actual director de la Comedia Municipal, que, dicho sea de paso, ha recalado en nuestras tierras buscando pergeñar artilugios demagógicos que no prosperaron en Tucumán, y que representa, obviamente, a los intereses del Estado municipal. Es decir, avalar el trabajo en negro, sobreexplotar a los compañeros no sólo en el cumplimiento de sus roles en la Comedia, sino también en la responsabilidad de llevar adelante talleres barriales sin soportes pedagógicos válidos y, como si esto fuera poco, integrarlos a elencos o grupos “fantasmas”, según su “ingeniosa idea” de co-producción (léase ahorro de los recursos del Estado en beneficio de sí mismo).


A partir de esto y bajo el pronunciamiento del “No a las co-producciones entre la Comedia Municipal y los grupos” y “Sí al fomento de la actividad teatral independiente”, el “Enviado” dio un paso al costado y nunca más volvió a intervenir.


La maduración política de los grupos de teatro independiente, a través del mantenimiento de las asambleas que se realizan en la sala perteneciente al grupo de teatro “Indice de Ilusos” y reconocida como único espacio para la organización y resistencia de la actividad, provocó la renuncia del delegado provincial luego del pedido de auditoría que el conjunto de los trabajadores del sector había realizado meses atrás.


En este sentido, en las últimas asambleas se confeccionó un petitorio en el que se exige a la dirección del INT un nuevo concurso de cargos y la nómina de quienes, por mandato de la asamblea, han sido avalados para representar al INT ante los teatristas catamarqueños.


La intervención de LuchArte, de ahora en más, dará la orientación necesaria en la toma de decisiones que tiendan a la apropiación de la cultura por parte de las masas trabajadoras.