Cultura

14/7/2020

De dónde viene y hacia dónde va la cultura Hip Hop

A propósito del libro “Rap de acá: historia del rap en Argentina” de Martin Biaggini.

Martin Biaggini tiene varias ocupaciones -director de cine, licenciado en la enseñanza de Artes Combinadas, docente universitario en Historia en la Unlam, Unla y la Arturo Jauretche-, pero las de historiador barrial y autor del libro “Rap de acá: Historia del Rap en Argentina” son dos de las que más lo identifican. Y es que el barrio y la cultura Hip Hop van de la mano. Y quién mejor para desarrollarla que un historiador que recorrió La Palito, La Gardel o Fuerte Apache, entre otros barrios carenciados, potreros del Rap y la cultura Hip Hop.

“Rap de acá” vino a sentar las bases historiográficas de una cultura que se ha colado en lo más hondo de nuestra sociedad. Siendo el primer libro de la historia del Rap en Argentina, se coloca como el material que todxs aquellxs que están interesadxs deben consultar para ahondar en los cimientos del Hip Hop.

El libro comienza con una aclaración inicial. Y es que, a cuenta del autor, el título quizás suene ambicioso, por lo tanto ha decidido que el mismo englobará una serie de publicaciones, editadas en tomos, en las que cada uno recorrerá las distintas generaciones del Rap. Martín Biaggini nos permite orientar nuestra mirada en las raíces sociales que dan origen y que se van sucediendo a lo largo de la historia del Rap y el Hip Hop en el país.

Rap y Hip Hop

Saber de dónde venimos es fundamental para saber dónde estamos y hacia dónde queremos ir, en una cultura de masas. Lo otro es desenredar conceptos que quizás repetimos como iguales ¿pero cuál es la diferencia de estos conceptos? El autor lo sintetiza de la siguiente manera. El Hip Hop es un movimiento sociocultural en el que se combinan varias prácticas urbanas. El Rap es una de esas prácticas urbanas del Hip Hop.

Podemos diferenciar algunos elementos de la cultura Hip Hop: el baile o breaks practicado por los bboys o bgirls; la música; el arte urbano (grafitis) y lxs MC’s o raperxs. Pero, sin embargo, algunxs artistas reconocidxs identifican otros como el conocimiento basado en los hechos de la vida real. Otras prácticas artísticas como el beat box, el slang y el skate o BMX.

La vieja escuela

Distintxs investigadorxs dan como origen del Hip Hop, no solo en Argentina sino en Latinoamérica -por caso Brasil y Chile mencionados en el libro-, a esos grupos juveniles que comienzan a experimentar con el breakdance bajo la influencia de los grupos de Estados Unidos, sobre todo del ciclo “Soultrain” -ciclo televisivo en el que se unen varios elementos:, como los MC’s que rapeaban sobre instrumentales de temas reconocidos de la música disco que en el inicio fueron loops (sonido repetido) y el scracht mientras bailaban funk soul con pasos sincronizados y con una destreza acrobática envidiable.

La influencia de Michael Jackson es indudablemente muy importante también para estos jóvenes incentivados y motivados por lo nuevo y lo extraño. El programa de canal 9 “El show de Michael Jackson” conducido por Domingo Di Nubila, ha sido uno de los primeros espacios donde los bailarines que imitaban al rey del pop y lo que veían en películas como “Breakdance” comenzaban a darse a conocer y masificar la cultura.

Podemos decir que en los estratos medios y bajos de nuestra sociedad comienza a desarrollarse este movimiento en la actual Ciudad de Buenos Aires y en el Conurbano bonaerense (sobre todo en las zonas oeste y sur) a mediados de los ’80 y luego de la censura establecida a la música en inglés por el gobierno de Galtieri, bajo la dictadura, en medio del conflicto de Malvinas. Intentando copiar, primero, y apropiándose, luego, de un movimiento sociocultural ajeno. Crews como La Moron City Breakers o Bron-K-Beat comienzan a ganar espacios públicos y darle una fisonomía a la cultura. Una fisonomía que comienza a homogenizar la cultura Hip Hop y sus elementos.

Podemos encontrar también a lxs MC’s pioneros del Rap argento como Jazzy Mel, Frost, Mike Dee, Derek, entre otros. Y a su vez, entre los pioneros el autor destaca varios grupos: Los Adolfos Rap, Club Nocturo, Presa del odio y Coprofagos Rap. La apertura económica y la llegada de material discográfico, pero a su vez, de instrumentos y herramientas de grabación que logran nuevos sonidos, incentiva a estos grupos de jóvenes a desarrollar a fondo la cultura.

Revolución, actitud y poesía

Revolución, actitud y poesía quizás sea la mejor definición que podemos encontrar de lo que es el Rap, desarrollada por un exponente como el rapero y poeta español Nach. Martín Biaggini resalta al Hip Hop y el Rap como un lugar de resistencia política y social en donde esto tres aspectos se reflejan.

Los lazos de asociatividad, colaboración y compañerismo en aquellxs “fundadorxs” de la cultura han sido fundamentales para lograr combatir todo aspecto de discriminación o prejuicios en este movimiento naciente. La denuncia de las distintas problemáticas, como por ejemplo el no llegar a fin de mes, la pobreza, o incluso la persecución policial, le dieron ese toque contestatario y antisistema (esencia del rap) que lo hizo atractivo para una generación que creció al calor de las movilizaciones contra las dictaduras militares, ligada íntimamente a la lucha por los derechos humanos.

Que el Hip Hop no abandone este camino de lucha y resistencia (apoyado en la asociatividad, el compañerismo y la colaboración de sus fundadorxs) es la llave para desenvolver la lucha por la defensa de la cultura, apoyando y apoyándose en la lucha de clases y en el movimiento obrero y la juventud explotada.