Cultura

7/3/2013|1258

El arte y los vampiros

Pompeyo Audivert es un actor, director y maestro de teatro, sobre todo de muchos jóvenes, autor de un artículo publicado en Prensa Obrera el 18/12/07 titulado "El Piedrazo en el Espejo" y firmante, junto a 500 intelectuales y artistas, de una solicitada en apoyo al Frente de Izquierda publicada el 3/7/11. En un reportaje publicado en la revista Ñ, de Clarín del 23/1/13, expresa una serie de posiciones que resultan centralmente contrapuestas a sus manifestaciones anteriores, dejando clara su confianza en el gobierno de Cristina Kirchner.


El arte


"Creo que en este momento hay una suerte de rectificación hacia un peronismo más interesante. Yo no soy peronista, pero me resulta más confiable que el de Menem, la Alianza o las variantes de la oposición". Agrega: "(…) ¿qué queremos: que vuelvan los vampiros o que sigamos así flotando más o menos en esto?". "Flotar más o menos en esto", es una reivindicación del pago de la deuda usuraria con el dinero de los jubilados y con inflación; cercenar a un trabajador accidentado el derecho al reclamo judicial; sostener la burocracia en los sindicatos; imponer un doble impuesto a los salarios -el de ganancias y el IVA-; tercerizar la represión en manos de patotas para-sindicales. Estamos ante una posición que consterna.


Por mejor que se lo pinte, el gobierno actual es un gobierno capitalista, lo cual significa que utiliza el poder coactivo del estado para defender un sistema de explotación social. Es frecuente escuchar la especie de que "esto" es mejor que "otro", ¿pero dicho en un artista y creador como Pompeyo". La juventud decía en el '68, en los teatros y tribuna, "pidamos lo imposible", Pompeyo le da un vuelta de página con un slogan poco edificante: "conformémonos con lo que hay".


Para Marx, las revoluciones proletarias debían criticarse, en forma constante, a si mismas, para nuestro dramaturgo, el objetivo es adaptarse al bonapartismo burgués – al menos como un consuelo. Si para el mismo Pompeyo, "El arte así no es un acontecimiento popular, porque estamos en el capitalismo y el arte y el capitalismo son enemigos", ¿no deberíamos ser todos anticapitalistas, y no los promotores de los casinos de Cristóbal López y de su extraña incursión en el petróleo y los medios, con un dinero de origen incierto? El Frente de Artistas ha denunciado la crisis del teatro independiente como un resultado de los escasos subsidios destinados a salas y elencos. Mientras Macri privilegia a las grandes producciones de la industria capitalista de la ‘cultural' y el turismo, los K hacen un uso discrecional de fondos en función de cooptar personajes con principios flacos. La lucha de los trabajadores y artistas contra el cierre de la Sala Alberdi y su privatizanción contra su cierre y/o privatización, es una demostración que macristas y kirchneristas vampirizan al arte y sus trabajadores, pues este ataque es resultado de un acuerdo en la legislatura, entre el macrismo y el kirchnerismo (ver Prensa Obrera, 4/1/13).


La poética


De acuerdo con Audivert, la poética y la actuación traspasarían la realidad (lucha de clases), "…mientras llega la revolución". Esto es diferente a lo que él expresó en "El Piedrazo…": "A través de la puesta en crisis de la mirada heredada se alcanza la visión poética." La "mirada heredada" no es otra que la de una sociedad estructurada en torno a la explotación, o sea la conversión de la humanidad en economía y el ser humano en mercancía. La crítica de esta mirada es ya revolucionaria; no se entretiene en conjeturas mientras dice esperar la revolución sino que trabaja para ella, aunque no tenga conciencia de que realiza ese trabajo. La crítica de la mirada heredada no tiene nada que ver con "esto es lo mejor que disponemos", como Pompeyo ‘mira' a CFK.


El Poder


Pompeyo finalmente manifiesta: "Pero ahora se está discutiendo o se está empezando a discutir quién tiene el poder". Es lo que dicen también los K, mientras meten a sus capitalistas amigos y a sus punteros en todas las posiciones de comando. Aunque cree descorrer el velo de una realidad disimulada, esta ‘mirada' fue refutada hace casi doscientos años: La burguesía cede el poder a una camarilla -resumía Marx en su Dieciocho Brumario de Luis Bonaparte- para mejor proteger su bolsa. Es lo que ocurre es situaciones pos revolucionarias, como lo fue en forma parcial el argentinazo, cuando los capitalistas se esconden detrás de una representación política supuestamente autónoma, para no ser responsabilizados de nuevo por la crisis social sub siguiente. El kirchnerismo llegó a esta posición en forma tardía, cuando su capacidad de acción está menguada, luego de la crisis sojera y el impacto de la crisis mundial, en 2008/9. Pompeyo asegura, lo cual es lamentable, que "no hay una represión a la lucha social".


Los asesinatos de los Quom, la represión a los activistas contra las mineras, las represiones de las patotas sindicales oficiales a los docentes, la responsabilidad de la policía, A. Fernández, Tomada y funcionarios del transporte en el crimen de Mariano, no le resultarían probatorias. Omite la represión cotidiana – en fábricas, barrios, comisarías, que no sería posible sin la afirmación de un poder estatal clasista del capital. Pompeyo: rompamos los espejos; la realidad no sólo se refracta sino que se transforma. Volvamos a tu Piedraza "…ya lo demuestran los piqueteros; se pueden inventar técnicas nuevas, cortar rutas, producir una unidad dinámica de los vínculos artísticos y ponerlos a funcionar en un sistema de lucha" ("El Piedrazo…").