Cultura

25/3/2010|1121

Hacia el Felco bicentenario

A partir de la crisis que se expande a lo largo y a lo ancho del mundo a pasos agigantados, la falsa teoría que promulgaba la “conquista global” del capitalismo se derrumba tanto como los intentos de los capitalistas por salvar al sistema. Claro que estos intentos fallidos se basan en utilizar los recursos de los Estados (al borde del default) para salvar a las grandes empresas y a los bancos en quiebra, acrecentando la miseria en la que se hunde la humanidad y avanzando hacia la ruina del planeta.

En Argentina, el panorama no es menos catastrófico: condenando a los trabajadores y sus familias al aumento de la inflación, el hambre y la desocupación, el gobierno nacional quiere utilizar las reservas del BCRA para pagar la deuda externa usuraria. Demagógicamente llama a esta confiscación nacional Fondo del Bicentenario.

Como parte de esta “demagogia oficial”, el gobierno nacional organizará festejos culturales por el bicentenario. Los gobiernos (oficialistas y opositores) de las provincias y los municipios harán lo mismo. Estos festejos se harán según el programa de la clase que los motoriza, o sea de la burguesía, la misma clase que a lo largo de la historia argentina ha perpetuado la explotación y la represión a los trabajadores.

Es en este marco en el que se pone en pie la organización del 8º Felco en Argentina, un festival artístico con el programa de la clase obrera, independiente de la burguesía y sus partidos. Faltando semanas para la realización del mismo, ya han confirmado su participación cientos de artistas entre músicos, cineastas, actores, plásticos, bailarines, fotógrafos, escritores, etc. Los artistas debemos tomar como nuestra la tarea de organizar el Felco Bicentenario para darle un marco de masividad, participación y debate. Tenemos que seguir convocando abiertamente, buscando sedes, consiguiendo adhesiones, etc.

La actual crisis del capitalismo pone en evidencia que este sistema sólo lleva a la humanidad a la catástrofe. A los artistas, esta situación nos golpea además en otro aspecto: dentro del marco del capitalismo no nos es posible desarrollar una cultura libre e independiente plena, debido a que la cultura queda limitada a las exigencias del capital. El “mercado artístico” le pone techo a la libertad creativa y la envasa según su necesidad para hacerla negocio. Es por esto que el negocio y el arte son, en esencia, incompatibles.

Por todo lo explicado y por la oportunidad histórica que nos ofrece la actual crisis, debemos impulsar el Felco Bicentenario para avanzar en la lucha que la clase obrera libra día a día con los cuerpos de delegados combativos, los paros y las huelgas, las tomas de fábricas, etc.

Para acabar con la explotación y con la mercantilización del arte y la cultura debemos, bajo la dirección de la clase obrera, destruir este sistema y dar paso a uno nuevo, construido sobre nuevas bases. Es la única forma de emancipar a todos los pueblos. Ese es nuestro horizonte.