Cultura

17/8/2020

“Lo que nos une es la cultura que es este sueño colectivo: el tango”

Bruno Giuntini, Andrea Bollof y Esteban Falabella, entrevistados en la radio de Músicxs Organizadxs.

Musicxs Organizadxs

El viernes 14 Músicxs Organizadxs (MO) emitió su programa Nro. 12, con la conducción de Ana Clara Moltoni, cantautora y referente de la agrupación. En esta ocasión fueron entrevistados importantes músicos del tango, quienes abordaron el momento tan especial que vive el género: Bruno Giuntini, violinista y luthier, Andrea Bollof, cantautora y Esteban Falabella, guitarrista.

MO viene llevando adelante asambleas para debatir cómo organizarnos ante la falta de trabajo y por nuestras reivindicaciones como trabajadores. El miércoles pasado se realizó una acción performática frente al Fondo Nacional de las Artes para exigir que se incluyan a todos los inscriptos en la Beca Sostener Cultura II.

La movida de las milongas

Bruno, que a veces duda del rótulo de “tanguero”, fuerza esos límites y se siente paria del género, nos cuenta que la pandemia le hizo “parar la pelota” para ver dónde estaba y reflexionar acerca de sus actividades, si bien como músico autogestionado del tango ya estaba acostumbrado a “vivir en un marco de dificultades”. Contó que estaba tocando con “Derrotas Cadenas” grupo que dirige y con el que organizan una milonga (“Amapola”) en el centro de Buenos Aires. Es un espacio autogestivo donde convergen múltiples disciplinas: música, danza, que es difícil de llevar pero la pandemia los obligó al parate. La tarea en la música conlleva múltiples actividades: tocar, autoproducirse, grabar discos, conciertos, prensa y hace tiempo aprendió a convivir con otra profesión para sostener la actividad artística: reparar y construir instrumentos de cuerda. “Los músicos que estamos parados -agregó- vamos a ser los últimos en reinsertarnos porque formamos parte de una serie de actividades consideradas superfluas dentro de la producción de bienes y servicios, somos prescindibles, sin embargo todo el mundo escucha música y muchos de los que han dejado de escuchar música durante un tiempo lo han vivido como una experiencia dura”.

El tango, sostiene, no puede ser considerado algo superfluo, ya que convoca miles de personas en cientos de milongas ya sea en Buenos Aires o en el mundo y en los sectores tangueros se están desarrollando asambleas, porque el músico de tango que trabajaba en milongas y tanguerías perdió su sustento.

Consultado sobre las políticas públicas con respecto al sostenimiento del tango, Bruno explicó que están atadas al tango for export y no al sostenimiento de espacios como las milongas o los músicos del género, que hay apoyo a través de organismos como el Fondo Nacional de las Artes o BAMUSICA pero en este momento y frente a la gran crisis no hay políticas de apoyo claras. “Mientras los empresarios reciben beneficios para mantener sus empresas nosotros los músicos estamos en un contexto muy vulnerable y más aún si no estamos insertos en una institución educativa o en los cuerpos orquestales” -dijo.

En cuanto a la composición, Bruno integra el cuarteto instrumental “Derrotas Cadenas”, con cuatro discos en el haber y con la premisa de tocar temas compuestos en el grupo en el marco de la novedad, incorporando el balance dentro de lo clásico y la sorpresa de lo desconocido. El cuarteto que viene trabajando desde hace 10 años, empezó como algo experimental y consideran la música como una narrativa instrumental, algo vivo, no ornamental.

Con respecto a su tarea como luthier contó que en tiempos de la pandemia se dedica a desarrollar un nuevo violín, con características mas apropiadas para el tango y con propiedades sonoras ligeramente diferentes, bajando la resonancia de la caja y con más caja para obtener un sonido más ronco. “La construcción de un violín tiene una artesanía establecida que es necesario romper”-concluyó.

La mujer hablando de sí misma

Andrea Bollof se define como letrista, cantora, creadora de canciones y arquitecta -aunque sin ejercer- y con muchos proyectos y discos.

Declara que este tiempo de pandemia “coincide con esa retirada hacia adentro”, con dedicarse al cuidado, a compartir más tiempo con sus hijos y sigue creando cosas aunque algunos proyectos quedaron en stand-by. Iba a presentar un disco solista pero avanzó en creaciones compartidas con otros letristas y compositores.

Con respecto a las letras se refirió a un proyecto muy interesante que se presentó el año pasado: “Mirada de Mujer”, que refleja un colectivo de letristas y compositoras mujeres de tango compilado por Vanina Steiner, libro que también se presentó en la campaña por el derecho al aborto. Andrea lo definió como “una acción de visibilización de la mujer en el tango”: la voz propia de la mujer hablando de sí misma, desde su protagonismo. Eso se contrapone con la mirada del tango tradicional en donde había compositoras que “nunca aparecieron en la foto” o nunca se hablaba de ellas, negándoseles la existencia. No sólo se invisibilizó a la mujer sino que esta era un objeto. “Si hablaba una mujer el guión lo escribía un hombre y la mirada era masculina puesta en los labios de una mujer”.

“Esta visión de la mujer aporta otra mirada y nos refleja y nos completa”- dijo Andrea. Lo contrario es quedarse con esa mirada tradicional y viene a actualizar el repertorio no solo de la obra femenina sino del tango del siglo XXI, el nuevo tango en cuanto a lo que es la musicalización y las letras también.

Con respecto a la Asamblea de Colectivos Tangueros y otras organizaciones, dijo que en estos tiempos se está dando un parate en la música en vivo y en las milongas, que en Buenos Aires hay más de 200 en todos los barrios, una movida impresionante. A partir de eso se está visibilizando lo que pasa con el tango, con una situación coyuntural que conocemos por la pandemia, pero con una precarización que viene de arrastre: venimos de faltas de políticas que apoyen a la actividad. El tango se relaciona con una gran movida de turismo, hay una entrada de plata por el turismo, sostenida por los artistas independientes precarizados en las casas de tango. Como artista se invierte en formación, instrumentos, ensayos, vestimenta, alimentando otros oficios y cuando querés hacer un proyecto es difícil contar con propios recursos, es difícil vivir de la música pero hay mucha gente que vive de los músicos. Pasa esto con otros sectores artísticos.

El año pasado presentamos un manifiesto con una visibilización detallada de la problemática que atañe al tango, a quienes trabajamos en el tango y otras disciplinas. Se efectuaron varias acciones, entre ellas un pedido de informes, porque hay muchas leyes de apoyo al tango pero no están reglamentadas. Se hizo un pedido de informes a la Defensoría para ver lo que estaba pasando. Entre las distintas organizaciones está la Asamblea Federal del Tango y hay un incremento de organizaciones en ese sentido. El tema que nos ocupa es el del Festival de Tango: se venía de conversaciones, reuniones con el Gobierno de la Ciudad para ver cómo se articulaba y de repente “se virtualizó el festival, sin streamming y que como puedas te tenés que filmar en tu casa… ¿qué pasó?”

El vaciamiento del festival del tango

Según Esteban Falabella “es un tiempo en el cual estamos interactuando toda la escena del tango por medio de asambleas por zoom”. “Es un momento histórico para nuestra idiosincrasia como movimiento, con el desafío de encontrarnos y confluir en una voz”. Así se refirió a la grave crisis que atraviesa el sector tanguero y denunció el ninguneo del gobierno de tener un gesto a partir de esa situación y en contraposición a la voluntad de construir de todo el sector.

Respecto a la instancia en relación al festival de tango, Esteban explicó que en las reuniones mantenidas con el Gobierno de la Ciudad se les informó que no había presupuesto para cultura y quedaba solo lo de BAMUSICA. Por otro lado sabían que existe una partida presupuestaria para el festival. Lo que ocurrió es que se llamó a la gente en forma aislada y se le propuso grabar a cada uno desde su casa con cualquier tipo de técnica y sin asistencia. También se acortaba la duración del festival a 3 días. En ese sentido se acordó efectuar una asamblea extraordinaria con la participación de 30 organizaciones de todas las disciplinas involucradas en el tango: musicalizadores, danza, indumentaria, coreografía, música. El objetivo era elaborar un documento que se dirigirá al jefe de gobierno, ministro de cultura y a la dirección de festivales en conjunto.

“Había expectativas, puesto que era la oportunidad de tener un gesto hacia el sector en época de la pandemia y no hubo nada. Se vació el Festival de Tango completamente”, dijo, y agregó: “esta es la primera vez que nos organizamos pero el desafío es que estas organizaciones perduren, se articulen y puedan accionar con las políticas públicas del gobierno que mira para otro lado”. En síntesis, mostrarle al gobierno las medidas que se podrían implementar, valorizar el tango y sus trabajadores.

Con respecto a los protocolos para que la música vuelva y que sacó el Gobierno de la Ciudad, Esteban señaló que en ese sentido el Festival de Tango era una oportunidad para demostrar cómo iban a funcionar.

Con respecto a lo musical afirmó que “lo que nos une es la cultura que es este sueño colectivo que es el tango, con más de 100 años de existencia nos nutre, nos da la energía para que nos juntemos”. Nos contó que tiene una conexión especial con la parte tradicional del tango y toca en el “Quinteto Real”, fundado por Horacio Salgán. Participa del Quinteto con Néstor Marconi, referente con el cual grabó una serie de discos y en el septeto de Juan Pablo Navarro, con el cual tiene una nominación a los premios Gardel como mejor álbum en vivo y hacen un tango con una estética contemporánea, compleja. Contó que salió el disco que grabaron con el “Quinteto Revolucionario” de la Fundación Astor Piazzolla y comenzaran a grabar otro. “Son varios proyectos que tratamos que sigan por más que no podamos tocar”-dijo.