La enorme poesía y vitalidad que recorre esta película no impide mostrar y transmitir todo el horror que significa la mutilación genital femenina, una práctica ancestral practicada en los pueblos de Africa y también por el islam. El director, Ousmane Sembene, ofrece una visión fascinante de la rebelión contemporánea contra este ritual por parte de las mujeres de una pequeña población de Burkina Faso. La tradición oral de las culturas africanas es tratada con profundo respeto, fundamentalmente el mooladé (derecho al asilo), exigido a la protagonista principal del film por las niñas, que se niegan a ser sometidas a la salindé (tradición de la ablación).

 

El cine africano, prácticamente desconocido en nuestro país, muestra a través de un artista maravilloso una obra de arte que conmueve, emociona, enorgullece, pero fundamentalmente transmite una esperanza en el triunfo de la lucha por los derechos de la mujer, utilizando la fuerza de las convicciones y de la solidaridad del grupo.

 

El director senegalés Ousmane Sembene, nacido en 1923, tiene una extensa filmografía y varios premios internacionales en películas que son verdaderos testimonios del Africa contemporánea, tal como él mismo lo expresa en una entrevista que recomiendo leer íntegra (en: http://www.golem.es/moolaade/index.php?s=entrevista). Allí dice: “En Africa siempre es hoy o nunca. Nada está planeado. En este momento, las mujeres evolucionan hacia la liberación, dejando atrás las obligaciones impuestas por la sociedad. Pero los gobiernos no ofrecen proyectos a la sociedad y la gente se deja seducir por el liberalismo a ultranza, en el que no tiene cabida la cultura. Africa imita a Francia y va hacia atrás. Por eso insisto en que debemos mirarnos. Como todos los pueblos de este planeta, tenemos fuerza y cualidades. No debemos alejarnos del mundo. Debemos rehusar vivir en una autarquía, pero sabiendo lo que es bueno para nosotros y llevarlo a cabo”.