El jueves 16 de agosto, mientras se desarrollaba en la peatonal una exposición de las tapas y contratapas de la revista Barcelona, auspiciada por la librería El Griego y por la Asociación de Prensa, irrumpió una patota municipal y, después de discutir y apretar a los organizadores, los golpearon y secuestraron la muestra. Arguyeron la falta de permisos y el "libre tránsito" (sic) en la peatonal.

El hecho tuvo una amplia cobertura mediática, incluso nacional, y una amplísima solidaridad popular y de organizaciones políticas y de derechos humanos. El gobierno no pidió disculpas ni sancionó a los responsables, ni devolvió la muestra.

Los organizadores de la exposición fueron invitados el martes 21 a hablar en la Marcha de la Comisión contra la Impunidad, que sigue siendo el canal de movilización democrática principal contra la política de Alperovich.

El gobierno de Alperovich y el municipal de Domingo Amaya pretenden imponer un conjunto de reglas con el propósito de regimentar la vida social, cultural, política y hasta familiar de los tucumanos.

Así han impuesto el toque de queda a la juventud a las 4 de la madrugada como horario tope de diversión, han limpiado el microcentro de vendedores ambulantes, han establecido una ley de prohibición de fumar, etc.

Ahora se han lanzado a regimentar los espacios públicos como las peatonales, lugar preferencial para que artistas, artesanos y otros se expresen, y muchos ganan allí su sustento.

El PO repudió estos hechos, se solidarizó con los organizadores y exigió públicamente el castigo a los responsables y la vigencia plena de las libertades democráticas.