Cultura

2/10/2008|1057

¿Y la pensión para los escritores?

A pesar de que las comisiones de Presupuesto y Cultura de la Legislatura porteña se habían comprometido a tratar en la primera semana de septiembre la iniciativa de la SEA del proyecto de Ley de Pensión para los Escritores, los diputados de la Comisión de Cultura incluyeron el proyecto en un temario de quince puntos… después del nombramiento de Cacho Castaña como Ciudadano Ilustre. Así, el proyecto corre riesgo de perder estado parlamentario.

En una conferencia de prensa en su sede, la comisión directiva de la SEA denunció que “es obvio que no se le quiere dar tratamiento o se lo quiere dilatar”, y que “no sólo no se cumplieron las promesas, tampoco hay visos de que se esté encarando la discusión del proyecto, que pierde estado parlamentario en febrero”. Pero no sólo en la Legislatura están dando largas al asunto: el ministro de cultura, Lombardi “pidió tres semanas para estudiar el proyecto y todavía estamos esperando que nos reciba nuevamente.”

El proyecto es un reconocimiento a la actividad literaria mediante un subsidio mensual vitalicio para las mujeres de 60 años y los hombres de 65 que hayan nacido en la Ciudad o tengan una residencia de quince años, que hayan publicado cinco libros o acrediten una trayectoria pública constante en la creación literaria no inferior a diez años.

La reivindicación deja atrás la vieja imagen del escritor como alguien de las clases acomodadas. El proceso de proletarización, y la ausencia de una política de apoyo a la cultura, ha obligado a las nuevas generaciones a autoeditarse si quieren ver impresos sus trabajos, a la vez que una gran cantidad de autores de edad mayor se encuentran en la miseria.

Mientras tanto, los diputados porteños esperan que un artista entre en terapia intensiva para declararlo Ciudadano Ilustre.