Educación

2/9/2020

Córdoba: las escuelas municipales reclaman conectividad para les estudiantes

Alarmantes cifras de desconexión.

A más de cinco meses de iniciada la cuarentena, el reclamo para que el Estado municipal dé respuesta a las necesidades de conectividad de los estudiantes de las 37 escuelas municipales de la Córdoba capital es cada vez más apremiante. La sistematización de los cortes evaluativos correspondientes al primer cuatrimestre del año arrojó datos estremecedores: entre el 30 y el 60% de les niñes no accede a la virtualidad por carencia de tecnología y/o de datos para establecer la conexión necesaria con les docentes.

Los cortes evaluativos constituyen un instrumento pedagógico central en las escuelas municipales. Se trata de un documento cuatrimestral sistematizado por los equipos directivos de cada escuela, que vuelca los datos cuantitativos y cualitativos aportados por docentes de cada grado y sala sobre los procesos de enseñanza llevados adelante. Por otra parte, facilitan la reflexión de las y los docentes sobre los grupos a cargo: sobre sus ritmos, sus particularidades, estableciendo demandas sobre eventuales derivaciones profesionales para complementar lo que la escuela debe tramitar.

Recordemos que las escuelas municipales atienden nivel inicial y primario, de niños, niñas y adultos. En condiciones de “normalidad”, los cortes permiten precisar cuáles son las fortalezas y debilidades de la dimensión pedagógica en cada institución, qué niños presentan mayor riesgo y vulnerabilidad y quiénes requerirían nuevas estrategias educativas para apuntalar sus procesos de aprendizaje. En medio del aislamiento social, el corte refleja la situación de extrema vulnerabilidad de los niños que estudian en las escuelas municipales, tanto por los bajos niveles de conectividad como por la ausencia de los medios para garantizarla.

Una encuesta realizada en una escuela de la zona noroeste de la ciudad, en ocasión de la entrega de módulos alimentarios, pone precisión a la extrema vulnerabilidad educativa en este contexto. Según esta, el celular constituye el elemento central para garantizar la virtualidad y es un bien escaso, en general propiedad de alguno de los padres, que además debe ser utilizado por todos los niños en edad escolar que integran la familia. Los y las docentes señalan que sólo logran contactarse con sus estudiantes entre una y dos veces por semana, en distintos horarios, en función de la posibilidad de que puedan disponer del uso del celular. El 40% restante ha mencionado diferentes motivos para explicar la desconexión: pérdida o rotura de celular, cambio de domicilio por dificultad para sostener el alquiler, falta de datos para conectarse, saturación de la familia para sostener la escolaridad, entre otros. De aquellos que acceden, el 72%  se conecta a partir de datos (prepago o abono); sólo el 25% dispone de wifi y el resto procura vincularse a una red cercana. El 83% se conecta a través de celular, mientras que menos del 10% tiene una PC. Ingresan a las páginas oficiales el 15% de los niños y de manera ocasional. El 46% mira programas educativos, siendo el principal Paka Paka.

La falta de acceso a la virtualidad implica que el proceso de enseñanza transcurre en formato papel, a través de cuadernillos que los y las docentes elaboran para cada entrega de módulos y que son retomados a través de esas conexiones ocasionales, con indicaciones de trabajo que luego requieren ser sostenidas por las familias. Los cuadernillos de Nación no son adecuados para el trabajo en nivel inicial y primario, requiriendo mediaciones que no pueden establecer los padres de los niños. En este cuadro general, las desigualdades educativas se profundizan.

los anuncios ministeriales sobre la evaluación para acreditación constituyen una presión que coloca la responsabilidad sobre el fracaso educativo sobre los sectores más vulnerables. Las propuestas oficiales de “continuidad pedagógica” bajadas desde la Secretaría de Educación son una fachada propagandística que no resuelve la realidad.

En oposición a este abandono, desde la Lista Fucsia hemos reclamado acciones concretas para que el Estado garantice el acceso a la educación en la virtualidad, tanto para los estudiantes como para los docentes, declarando una emergencia educativa. Exigimos que se provea la conectividad y los equipos tecnológicos para que estén contempladas las condiciones elementales de estudio. Nos ponemos a la cabeza de defender a los trabajadores docentes que han quedado por fuera de los actos públicos curriculares, exigiendo que el Estado garantice su designación y desarrolle un proceso de capacitación que garantice la continuidad pedagógica 2020/2021.