Educación

25/4/2020

Les estudiantes terciarios del Conurbano Oeste ante las clases virtuales

Se realizó un exitoso plenario de agrupaciones estudiantiles.

presidente centro de estudiantes ISFD n°34 ,consejera académica ISFD n°29

Se realizó un importante plenario con estudiantes de los institutos terciarios 29 de Merlo, 34 del Palomar, el Conservatorio de Morón, el Rojas de Moreno y el 44 de las Heras. Allí debatimos sobre la situación de la virtualización de las cursadas.


En primer lugar, se remarcaron las dificultades que tenemos para acceder a esta nueva modalidad: falta de aparatos tecnológicos, de conectividad y hasta de capacitación en tecnología de la información y el conocimiento dentro de las carreras de formación docente. Es lo que quedó en evidencia a comienzos de abril con el caos de las inscripciones online, que demostró que las propias plataformas de los institutos no están preparadas para la virtualidad.


Subrayamos también la situación de precariedad en las que vivimos les estudiantes. En ese sentido el centro de estudiantes del ISFD 34, conducido por la UJS, realizó una encuesta en el profesorado que muestra la imposibilidad que con más de 300 respuestas arrojó que el 53,4% se encuentra sin trabajo, y que dentro de los que tienen empleo más de la mitad cree que su puesto corre peligro y casi un tercio está cobrando su sueldo con rebajas. Además un 26,2% no posee computadora propia y un 12,7% no cuenta con Wi-Fi. No es menor remarcar que el 44,5% del total tiene al menos una persona a cargo (cifra que trepa al 55,1% si se cuenta a aquellos que quedan a cargo de una o más personas ocasionalmente).


Este cuadro revela lo limitado del plateo de la burocracia Celeste de Suteba y las agrupaciones kirchneristas nucleadas en el ETO (Estudiantes Terciarios Organizados), que se limitaron a pedir que se liberen los datos de internet, porque para ingresar a las plataformas es necesario contar además con las herramientas tecnológicas, la capacitación y tiempo.


Se discutió que las plataformas virtuales pueden servir para adelantar algunas lecturas y mantener contacto con el docente, pero nunca pueden igualar el proceso de enseñanza-aprendizaje del trabajo en las aulas. En este punto pusimos énfasis en la situación de sobreexplotación de nuestros docentes, que deben reformular sus clases a la modalidad virtual trabajando más allá del horario de las cátedras. Y se cuestionó la persecución que llevan adelante muchos directivos, que integran los grupos de WhatsApp y de las aulas virtuales de las diferentes materias para controlar que docentes y estudiantes cumplan con lo mandatado por la Dirección de Educación Superior de sostener las clases virtuales a toda costa.


El debate sirvió para motorizar diferentes iniciativas contra el agravamiento del carácter expulsivo de la educación superior en esta situación, como impulsar la campaña por el aumento de la beca progresar a 10.000 pesos y la ampliación de les beneficiaries, así como por el acceso universal a los recursos tecnológicos necesarios para las clases virtuales. Votamos también realizar una campaña por la reapertura de las inscripciones.


Por último, se resolvió formular una propuesta común de las agrupaciones independientes del gobierno para llevar a cada terciario para reclamar que no se tome asistencia, que las cursadas no sean evaluadas, y que se trabaje en una adecuación del calendario académico frente a la pandemia.


El plenario fue un gran paso adelante en la organización de les estudiantes terciarios para que nadie se quede afuera.