El 2 de junio el bloque de concejales de Tigre de Juntos por el Cambio, encabezado por Segundo Cernadas, presentó un proyecto en apoyo al proyecto de ley presentado por el diputado nacional del mismo espacio político y exministro de Educación Alejandro Finocchiaro donde se postula a la educación como un servicio esencial y se exige el funcionamiento de guardias durante las huelgas docentes (Infobae, 11/5).

Bajo el eslogan de “los chicos en la escuela” se revela un programa antiobrero, que desconoce que es imposible llevar adelante un proceso educativo con un plantel docente “mínimo”, y otras causas de pérdidas de clases como la falta de gas, que precisamente son parte de las causas de los paros docentes. El proyecto persigue una campaña declaratoria para disputar una base electoral con posiciones reaccionarias.

Este enfoque no es nuevo. En abril de 2021, en el marco de la disputa contra el decreto nacional que establecía clases virtuales para el AMBA, Cernadas, entonces presidente del Concejo Deliberante de Tigre juntó firmas en apoyo a una ley que declare a la educación como un servicio esencial (Zona Norte Ambiental, 17/4/2021), acompañando otro proyecto del PRO en diputados con el mismo contenido (Infobae, 15/4/2021).  En ese momento el intendente de San Isidro, Gustavo Posse decretaba a la educación un servicio esencial (La Noticia Web, 16/4/2021).

Si bien esta iniciativa parece ser un caballito de batalla de Juntos por el Cambio, sería un error asumir que esta posición es propia de “la derecha”. En 2014, en el marco de una gran huelga docente provincial contra el entonces gobernador Daniel Scioli por el salario, el vicegobernador camporista Gabriel Mariotto planteó la declaración de la educación como servicio esencial (La Tecla, 20/3/2014). El propio gobierno Frente de Todos ataca sistemáticamente las condiciones de trabajo de la docencia.

Los proyectos que plantean la prohibición del derecho de huelga son una declaración de intereses, porque la docencia aún cuenta con la posibilidad de ejercer ese derecho en los hechos. Repudiemos categóricamente esta ofensiva.