Educación

23/8/2018

Un informe confirma el alarmante estado de la infraestructura escolar en Rosario

El gobierno de Lifschitz es responsable. Basta de ajuste en educación.

La semana pasada se dio a conocer un relevamiento de escuelas de la ciudad, realizado por Amsafe Rosario y ATE, a partir de la explosión en la escuela número n° 49 de Moreno que se cobró dos vidas producto de las paupérrimas condiciones edilicias del lugar. Al mismo tiempo, Amsafe Rosario realizó una concentración y movilización hasta las puertas de la sede rosarina del Ministerio de Educación. 


El relevamiento en cuestión puso de manifiesto que en Rosario –al igual que en territorio bonaerense- también es moneda corriente el deterioro de las escuelas por el desfinanciamiento presupuestario y la precariedad edilicia.


El estudio hecho sobre 107 instituciones revela cifras alarmantes. Por ejemplo, el 56% de las escuelas tiene problemas en las instalaciones de gas. Dentro de este punto vemos que una de cada cuatro escuelas tiene un artefacto de calefacción habilitado para instituciones educativas y un 49% presentan problemas en el tendido de luz.


Hoy en día las escuelas de Rosario no están en condiciones de brindar seguridad a lxs estudiantes, docentes y auxiliares, tal como sucedió en la escuela Nigeria Soria, donde en 2 años explotó un tablero eléctrico, se cayó un tubo fluorescente e hirió gravemente a 3 alumnxs, sumado a que hace unos meses se debieron suspender las clases justamente, por las condiciones edilicias, con agua en las paredes, techos rotos, y desperfectos eléctricos. También en el Normal 2 un alumno se electrocutó, y en el Nacional 2 se vino una pared abajo.


Estos ejemplos demuestran que la situación en las escuelas es insostenible desde el punto de vista de la seguridad de lxs que allí concurren. Además de ser bombas de tiempo debido al deterioro edilicio, tampoco pueden enfrentar emergencias, debido a la falta de normas en la seguridad. El 68% carece de salida de emergencia y 51% no tiene extinguidores en regla. Vale agregar que del total de las escuelas que se encuentra en construcción o reparación (26%) solo el 42% “conoce y cumple el protocolo de obras".


El PS y Cambiemos, aliados en el ajuste educativo


Esta situación se agrava con el nuevo decreto del gobierno nacional en el marco del acuerdo con el FMI y la eliminación del fondo federal solidario. Con esto la provincia dejará de recibir unos u$s1000 millones para infraestructura. La salud y la educación serán las principales afectadas.


El gobierno del PS, en sintonía con Cambiemos, viene desfinanciando de manera sistemática la educación pública. Esta complicidad se evidencia en la firma del Pacto Fiscal impulsado por Macri, el cual golpea de lleno a la educación pública debido al desfinanciamiento presupuestario. La muerte de los dos directivos en Moreno nos indica que la política educativa del gobierno nacional, seguida por los gobernadores de distinto pelaje, choca directamente contra las necesidades fundamentales de estudiantes, docentes y auxiliares. Mientras el gobierno provincial hace demagogia hablando de "récord" de inversión en obra pública, lo que en realidad crece son las denuncias de las condiciones deplorables de los establecimientos educativos.


Basta de ajuste en educación


Frente a esta situación crítica, creemos que lo fundamental es seguir el camino de los docentes y estudiantes de Moreno: la movilización y la organización para arrancarle al Estado las reformas edilicias, el presupuesto y las obras necesarias para poder estudiar y trabajar en condiciones. El Enargas acaba de anunciar vía resolución, que todos los establecimientos educativos del país deberán ser inspeccionados por las proveedoras del servicio, en el caso de Santa Fe, por Litoral Gas. A los colegios que muestren problemas, se les deberá cortar el suministro. Advertimos y reclamamos que luego de cortado el suministro donde corresponda, el gobierno y Litoral Gas procedan a garantizar las refacciones que sean indicadas. 


Desde la UJS y la agrupación secundaria El Impulso, comenzaremos una campaña sobre las escuelas de la ciudad a partir de esta situación. ¡Sumate!