Educación

31/3/2020

Universidad Nacional de San Martín-Humanidades: cuarentena y cursadas virtuales

El inicio del ciclo académico en la Universidad de San Martín debería haber comenzado el 16 de marzo para les estudiantes de segundo año en adelante, y el 23 para les de primer año, quienes semanas antes se encontraban aún cursando el CPU (Ciclo de Preparación Universitaria).


A dos semanas de dicho inicio, mismo día en el que se decretó la cuarentena, les estudiantes de la Escuela de Humanidades nos encontramos con una gran cantidad de problemas a la hora de llevar adelante la cursada.


En primer lugar, Letras demoró una semana en saber qué dinámica se llevaría adelante para la cursada de sus materias. Por su parte, les estudiantes de Filosofía se ven completamente a la deriva con respecto al estudio de sus materias; por ejemplo, en primer año, quienes deben cursar introducción a la filosofía, lengua castellana, lógica y proseminario, no cuentan siquiera con un diccionario filosófico para comprender los textos, ni materiales audiovisuales para materias como LC. En ese mismo sentido van estudiantes más avanzados en la carrera, quienes ni siquiera tienen acceso a plataformas virtuales y dependen del intercambio de mails con sus docentes.


En Educación, aquellxs que utilizan el +Campus no pueden acceder a sus clases ya que la misma plataforma se ve saturada al momento de iniciarla. Lo mismo sucede en Historia y Comunicación, considerando también la carga bibliográfica que tienen y sin un espacio para clarificar por completo sus dudas.



Por último Psicopedagogía, la carrera con más estudiantes de Humanidades, lleva adelante su cursada fundamentalmente mediante foros en los cuales la mayoría de las dudas quedan sin responder, más allá del gran esfuerzo que realizan les docentes, en algunos casos hasta brindando su propio número de WhatsApp para intentar clarificar un poco más los materiales de estudio.


La sobrecarga en les docentes es piloteada con la convocatoria a estudiantes adscriptxs que colaboren en el proceso de aprendizaje. En gran medida, es gracias a les docentes que se están pudiendo llevar adelante las clases virtuales para no perder el cuatrimestre, a pesar de contar con escasos recursos que les lleva a improvisar modificaciones y adaptaciones en los programas de estudio a cuenta propia, hasta invirtiendo su propio salario para auto-capacitarse, debido a la acotada capacitación virtual que brindo la Universidad y la inexistencia de una plataforma común de centralización de foros, aulas virtuales y demás plataformas utilizadas para llevar adelante la cursada.


No todos reman


En estas difíciles condiciones de cursada, donde nos organizamos estudiantes y docentes para llevarlo adelante, las autoridades y el gobierno nos dejan a la deriva.


La Unsam tiene un presupuesto otorgado por el gobierno y cuenta también con recursos propios que le dan poder de decisión sobre hacia dónde dirigirlo. Deberían ser utilizados en función de garantizar las clases virtuales, con el acceso de todes les alumnxs a las diversas herramientas necesarias y condiciones laborales de les docentxs. Por el contrario, siguen una política de aumento de la precarización docente y ratificación de las desigualdades existentes entre estudiantes, abandonando a quienes no cuentan con los recursos ni condiciones necesarias para llevar adelante esta modalidad de cursada.


Es necesario que se incorpore a estudiantes y docentes electxs democráticamente al comité de crisis formado por la universidad, para llevar adelante un control efectivo de la dirección de las finanzas y tomar las medidas necesarias para resolver estas problemáticas ante el anuncio de la continuidad de la cuarentena. Esta orientación contrasta con la actual conducción del centro de estudiantes de Humanidades, ligado a las autoridades y el gobierno, que solo se dedica a ¡tuitear! arrobando a empresas de telefonía celular para que “liberen datos”.


La virtualidad no es nueva…


De fondo hay una pugna por la orientación y formato que debe tener la pedagogía. La "virtualidad" es un elemento que la Escuela de Humanidades embellece y aplica hace varios años, antes de la situación excepcional actual producto del CoVid-19.


Contamos con más de 40 unidades académicas aranceladas, en su mayoría virtuales. Hace dos años se reformó el 1º año de psicopedagogía, ahora el 2º, a una modalidad semi-virtual. La pulseada es entre exigir más presupuesto, construir aulas, garantizar docentes con sus respectivas condiciones laborales, otorgar becas, etc; frente a recortar todas estas áreas, avanzando en títulos cortos, virtuales, y con mayor cantidad de contenidos arancelados.


Alertamos ante la posibilidad que finalizada la cuarentena y habiéndose retomado las clases, las autoridades se agarren de esta metodología actual que aplica el conjunto de la escuela, para impulsar más a fondo la virtualización de nuestras carreras y, con ello, la exclusión de un sector del estudiantado, la precarización de les docentes, y la degradación de nuestra formación académica.


Un planteo para transitar las clases virtuales


Ante este cuadro de cuarentena obligatoria debido al COVID-19 y agravamiento de la crisis sanitaria nacional, desde La Caldera (UJS-PO) planteamos:


1) Que la Unsam cuente con todos los insumos necesarios que garanticen condiciones permanentes de higiene por igual a estudiantes, docentes, no-docentes e investigadorxs aunque se supere la pandemia.


2) Que las autoridades garanticen la disponibilidad de los materiales para que todes les estudiantes puedan llevar las lecturas programadas para el cuatrimestre.


3) Que en todos los intercambios virtuales que haya entre docentes y estudiantes, se chequee que el conjunto de les inscriptes en la cursada estén pudiendo participar y que en el caso de que esto no sea así, se establezca con claridad que no se puede avanzar sin que todes les estudiantes inscriptes accedan a su derecho a estudiar.


4) Que se garantice licencia extraordinaria paga a les docentes que por sus condiciones de vivienda, familiares u otras no tengan condiciones para llevar adelante las cursadas virtuales en el marco de la pandemia, al igual que WiFi, computadoras y herramientas virtuales para docentes y estudiantes.