16 de septiembre, Noche de los Lápices

Todos a plaza de mayo, contra la represión

Este nuevo 16 de septiembre nos plantea como nunca la tarea de defender las más elementales libertades democráticas. Lo de­muestran el creciente número de presos políticos, desde los vendedores ambulantes encarcelados desde hace dos meses por la Legis­latura, hasta Raúl Castells; la vi­gencia de los procesos que se les si­gue a más de 4.000 luchadores po­pulares; la represión contra los tra­bajadores que defienden sus pues­tos de trabajo, como en Gatic; las causas judiciales que se les sigue a los desocupados que tomaron la planta de Termap en Caleta Olivia; el juicio aún pendiente a los estu­diantes Salgado y Ogando.


Nos llama a movilizarnos en de­fensa de nuestras libertades el Có­digo Contravencional del "abogado de derechos humanos”, Ibarra, y del "presidente de Boca”, Macri. Nos convoca la lucha contra las leyes re­presivas de Kirchner, Duhalde y el empresario Bluraberg. Nos suble­van la absolución judicial de la Bo­naerense por el atentado a la Amia, el "gatillo fácil” y la impunidad de los asesinos materiales, políticos e intelectuales del Puente Pueyrredón mientras que se le pone fecha al juicio contra Hernán Gurián, pi­quetero y víctima de la represión que le costó la vida a Darío Santillán y a Maximiliano Kosteki.


Para el movimiento estudiantil secundario se trata, además, de imponer la más amplia libertad de organización, crítica y acción para formar los centros de estudiantes, contra los “códigos de convivencia”, que no son otra cosa que una adap­tación escolar de los edictos policiales de la dictadura.


El “hijo de las Madres” ha to­mado como método la infiltración de los servicios de inteligencia del Es­tado entre las organizaciones popu­lares y las provocaciones en las mar­chas para justificar la detención ar­bitraria de los manifestantes.


Como Videla y Massera.


El hombre que pidió “perdón en nombre del Estado” por la desapa­rición de Claudia Falcone y sus compañeros se ha revelado como lo que es: un alcahuete del FMI, de las patronales, de la cana y de los curas.


‘También como Videla y Masse­ra.


Como nunca, debemos aclarar, explicar y repetir: esta no es una marcha ritual, folklórica, conmemorativa. Está llena de este nuevo contenido. No es un desfile por el pasado, sino una movilización por nuestro futuro.


Libertad a Raúl Castells y a to­dos los presos políticos. Abajo las leyes represivas de Kirchner- Blumberg. Desprocesamiento de todos los luchadores. Basta de per­secución a los centros de estudian­tes. Disolución del aparato represi­vo del Estado. Juicio y castigo a los asesinos de ayer y de hoy. Fuera el FMI.


La UJS llama a marchar masi­va y unitariamente este 16 de sep­tiembre hacia Plaza de Mayo y a desplegar este programa ante la estrábica mirada del represor Kirchner.