Agitación en Grecia


Continúa en Grecia una lucha masiva contra la privatización de la educación superior. Todas las universidades están totalmente paralizadas desde principios de enero; con casi todas las facultades ocupadas por los estudiantes, los profesores en huelga (desde el 5 de febrero en forma indefinida) y las manifestaciones masivas de decenas de miles en Atenas y en las principales ciudades del país. La radicalización de los estudiantes es más explosiva ahora que en la ola de ocupaciones de mayo-junio de 2006, cuando el movimiento estudiantil obligó al gobierno a dar marcha atrás y posponer el voto del nuevo proyecto de Ley de Educación Superior.


 


El 10 de enero, el derechista gobierno de Nueva Democracia —con el apoyo de la dirección del partido oficial de la oposición, Pasok— introdujo en el Parlamento cambios en la Constitución, primeramente un cambio en el artículo 16 (que prohíbe la existencia de universidades privadas). Luego, como el movimiento estudiantil estaba creciendo y los profesores se unieron a esa lucha, hubo una escalada de ataques por parte del gobierno (los medios de comunicacion presentaban a los estudiantes como “terroristas” y a las universidades ocupadas como “bases terroristas”), se volvió a introducir en el Parlamento el proyecto de Ley de Educación Superior del año anterior, planeando abolir el asilo académico en el espacio universitario (como en el periodo de la dictadura militar).


 


Estas acciones del gobierno han radicalizado aún más a los estudiantes a pesar del rol traicionero jugado por una sección de los profesores y la burocracia sindical.


 


La dirección del Pasok del GSEE (la Confederación General del Trabajo de Grecia), cuando los estudiantes el 27 de enero fueron a sus oficinas centrales, para solicitar una acción solidaria con la huelga, llamó a la policía antidisturbios y dejó bien claro que no solamente estaba a favor de la privatización de las universidades sino que ellos mismos transformarían a la “Academia del Trabajo” de la Confederación ¡en una universidad privada!


 


Pero el Pasok está internamente dividido. El resultado produjo un desarrollo político mayor: el 2 de febrero Georges Papandreu introdujo en el Parlamento una moción de desconfianza al gobierno, anunciando también que su partido se retiraba del procedimiento de reforma de la Constitución (lo que rompe el consenso con el gobierno sobre el articulo 16). Sin el voto de los diputados del Pasok no puede alcanzarse la mayoría de 180 requerida por la actual Constitución para ser modificada.


 


No hay duda que Papandreu está haciendo una maniobra para distender una crisis interna del Pasok y evitar que los diputados del Pasok rompan públicamente con la disciplina del partido y voten el 20 de febrero contra el cambio constitucional. Además, es posible e incluso probable que él rápidamente vuelva a estar en defensa de la privatización de la educación. No obstante, hay realmente una retirada parcial temporaria por parte del gobierno. Hay rumores de que llamaría a elecciones anticipadas, dado que la derecha está convencida de que puede ganarle al débil Pasok y su despreciable dirigente. Pero aun en este caso, el próximo gobierno derechista (o cualquier otro burgués) será mucho más débil viniendo de esta fuerte confrontación y con un movimiento social masivo de la juventud.


 


El protagonista de esta lucha contra la privatización de la educación superior desde mayo pasado es el EAAK (Movimiento estudiantil unido de izquierda anticapitalista), un frente de extrema izquierda (que incluye a los estudiantes del EEK).


 


Los partidos parlamentarios tienen poca influencia y los stalinistas del KKE (Partido comunista de Grecia), a pesar de sus jugarretas burocráticas e intimidaciones, son políticamente una minoría que controla solamente tres facultades (sobre un total de aproximadamente 450).


 


El movimiento estudiantil bajo la dirección del EAAK llama al movimiento obrero a unirse en la lucha por una huelga general para el 15 de febrero y avanzar en un programa de reclamos contra la privatización, por una educación libre, pública y popular y contra el desempleo y la flexibilidad laboral, por “menos trabajo, trabajo para todos”.