Alkan: lucha obrera frente al derrumbe capitalista

Entrevista realizada con la colaboración de la compañera Raina del EEK

Entrevistamos a Sotiris Papadimitriou, que trabaja en la gran planta «Aluminio de Grecia» desde 1984. Fue elegido delegado sindical en dos oportunidades y durante tres años representante en la seccional sindical: en Livadia, provincia de Viotia, en el Centro de Grecia.


Hay dos asociaciones en la fábrica: la de los trabajadores estables con 900 afiliados y otra, de los contratados, con 300 compañeros. La asociación más grande está controlada por sindicalistas de los partidos de Memorial (Pasok, Nueva Democracia). Es una planta industrial integrada con minas de bauxita, producción de aluminio en electrólisis, aleaciones de fundición y planta de procesamiento de desperdicios. Su producto se exporta. Compite con otras de Europa porque es casi la única que tiene las materias primas (minas de bauxita). En 2009, la demanda del alumınıo se redujo por la crisis que contrajo la produccıón industrial. Los altos costos de la electricidad y el bajón productivo llevaron a que fuera comprada por el monopolio Alkan (el mismo que intervino en el golpe paraguayo para instalar una superindustria de aluminio que optimiza el bajo costo eléctrico).


En 2012, la nueva patronal decidió reducir el costo laboral a un quinto del costo total, casi 150 millones de euros. Una reducción salarial del 10%. Como el sindicato no hacía nada, Sotiris, con su agrupamiento, reclamo que los trabajadores hicieran asambleas para rechazar los recortes salariales, que se repartieran las horas del trabajo y tomaran nuevos trabajadores. Encarar esta lucha haría que encontraran apoyo en los pueblos de la región. Los trabajadores votaron a favor. La dirección sindical fue obligada a aceptar la resolución de la asamblea. Pero la burocracia sindical tratando de encontrar un camino de negociación con la patronal fue -en septiembre 2012- a la Corte judicial para que ésta rechazara los recortes salariales ilegales.


Después de cinco meses, la decisión de la Corte fue contra los trabajadores. Se perdió un valioso tiempo para organizar la huelga y unirse a las luchas de otros sectores, como los trabajadores del Metro y del sector público (OTA) en enero de 2013. Una derrota que la patronal de Alkan aprovechó, usando el espantapájaros de la crisis, para reducir los salarios en otro 10%, esta vez amparada en el Memorando 3 (enero 2013) que permite a los capitalistas estas reducciones.


Sotiris fue expulsado con su agrupamiento del sindicato por ser opositor al gobierno de Samaras y a cualquier gobierno que siga esta política antiobrera para imponer los planes de ajuste (pago de la deuda pública) reclamada por la Troika. Muchos compañeros de su agrupamiento, después de las elecciones de 2012, se unieron a Syriza. "Pero la política de ésta en los sindicatos es la búsqueda de la interacción con el gobierno y la negociación con los jefes" nos dice.


La presencia de Papadimitriou en la Conferencia Europea es parte del proceso de reorganización de los luchadores obreros que están buscando una alternativa revolucionaria a la crisis del capitalismo.