Bolivia: militarización y “pacificación” dos caras contra el pueblo trabajador

En estos momentos, Bolivia esta militarizada.


El ejército y la policía han sido movilizados y ocupan lugares públicos y estratégicos preparados para reprimir, anunciando que permanecerán en esos puestos hasta el 24 de enero.


Es que este próximo miércoles 22, se cumple el 10° aniversario de la declaración del Estado Plurinacional. En su momento Evo Morales declaró los 22 de enero feriado nacional.


Ese día también habría terminado su mandato presidencial Evo Morales, depuesto por un golpe cívico-militar.


Evo Morales y diversas direcciones del MAS han convocado a realizar concentraciones en Bolivia para escuchar por pantalla un discurso suyo de cierre de mandato, emitido… desde Buenos Aires. Ese mismo día, Evo realizará un acto en el estadio de Deportivo Español en el barrio de Bajo Flores, uno de los centros de la comunidad boliviana, en la ciudad porteña.


Una semana antes, Evo Morales en uno de sus giros verborrágicos anunció su disposición a constituir milicias populares en Bolivia. Esta declaración levantó una ola de críticas y protestas, desde el representante de las Naciones Unidas y la embajada norteamericana, que se habría entrevistado con el Ministerio de Relaciones Exteriores argentino, hasta voceros de la Unión Cívica Radical que amenazaron con presentar un proyecto parlamentario para que se le quite a Evo Morales su condición de refugiado político, pasando por supuesto, por el gobierno golpista de Añez.


Desde el gobierno argentino, siguiendo la presión yanqui, le reclamaron, bajo cuerda, a Evo que se retractara públicamente. Cosa que este hizo, casi de inmediato, insistiendo ahora en la “pacificación” de Bolivia, que significa que continúe la impunidad de la represión golpista contra opositores y trabajadores.


El alarde “miliciano” de Evo Morales es también típico de las maniobras de líderes nacionalistas burgueses desalojados del poder, para mejor poder negociar con los gobiernos golpistas y/o derechistas. En la Argentina, fue Perón, el que –en la década del 70 alentó las “formaciones especiales” de Montoneros y otras guerrillas; para una vez asumido el poder lanzar una persecución y represión genocida contra los “imberbes” que no se disciplinaban lo suficiente. Lo de Evo es una débil y pusilánime caricatura de este tipo de maniobra.


Evo Morales se ha colocado, por entero, en el terreno de postergar toda lucha tras la convocatoria electoral para el próximo 3 de mayo.


Abajo la militarización: movilizarse por la libertad de los presos, cese del cierre de radios comunitarias, por los plenos derechos de prensa, organización, manifestación y a la actividad sindical en Bolivia.


En Bolivia y la Argentina, se plantea la tarea histórica de poner en pie un partido obrero independiente de las corrientes burguesas.