“Esperábamos en Caracas el mayor Foro, iniciado por la mayor marcha, y tuvimos una movilización pequeña en un Foro raquítico”, se quejó un militante del PT brasileño en la gran mesa-debate de piqueteros y campesinos sin tierra que montó el PO.

 

Efectivamente, la marcha inicial no superó las 8.000 personas (15.000, según los organizadores) y en el Foro no participaron más de 5.000 personas de las 60.000 previstas. Al punto que la prensa “escuálida” (gorila) pasó del temor a la horda chavista que paralizaría Caracas, a compadecerse por las carpas de estudiantes, que pasaron “frío y hambre” en los parques.

 

Hubo una pobre presencia de la izquierda europea, que no presta a Chávez el apoyo que proporcionó a Porto Alegre, cuando la “banca” era Lula. Pero, al mismo tiempo, el trípode organizador (brasileños, cubanos y venezolanos) presentó figuras de tercera línea. El gobierno de Venezuela mandó funcionarios menores a mantener la “mística” del Foro, ahora, para colmo, “descentralizado”. Otra ‘edición’ se realizó en Bamako, Malí, Africa, y una tercera se hará en Karachi, Pakistán.

 

Los uruguayos brillaron por su ausencia, de Bolivia poco y nada. El “avión argentino” fue copado por funcionarios oficiales (pingüinos del Ministerio de Desarrollo Social, Barrios de Pie, FTV y algunos de la CTA). Por fuera de ellos se vio a Madres Línea Fundadora y a una delegación militante de dirigentes sindicales, piqueteros, estudiantiles y de fábricas bajo gestión obrera del PO que llegó por sus propios medios. La numerosa delegación colombiana llegó atravesada por la deliberación de la izquierda de ese país. Al igual que los haitianos, los compañeros colombianos llevaron fuertes denuncias sobre la represión política en sus países.

 

Un integrante del Comité Organizador le dijo a Terraviva, la revista del Foro: “Nadie me pudo responder por qué las reuniones programadas nunca se hicieron o se hicieron en otra parte”. De inmediato, la redacción se pregunta ¿cuántos eventos se cancelaron en el último minuto? Nuestra impresión es que fracasaron la mayoría.

 

La Cumbre de Presidentes de Mar del Plata ha reemplazado al Foro Social.

 

El debate

 

El Foro se vio envuelto en un debate “existencial”.

 

Roberto Savio, del Comité Internacional, reconoce que las organizaciones del Foro están divididas en tres corrientes: los que se consideran ocupados en sus gobiernos; los que quieren seguir con un espacio de expresión cada vez más disperso; y los que “queremos centralizar más, volver a las grandes plenarias y crear un espacio propositivo”. Es decir que en medio de la invasión imperialista a Irak, en una etapa de insurgencia y giro a la izquierda en América Latina, el Foro Social ha perdido vigencia. Sus mentores están en el gobierno y son un factor de contención de la rebelión popular y las luchas. Han enviado tropas a Haití por cuenta y orden del imperialismo yanqui o han firmado tratados de inversión con EEUU, como Uruguay.

 

Por esta situación de raquitismo, la presencia de las organizaciones de lucha al interior del Foro (incluso en las “grandes plenarias”) cobró mayor peso específico. Desde el vamos, las denuncias contra Lula arrancaron fuertes aplausos en la Asamblea Inicial de los Movimientos Sociales. Lo mismo el reclamo del retiro incondicional de las tropas en Haití (por parte de una argentina de “Diálogo 2000”). También la denuncia de la base norteamericana en Paraguay. Para sorpresa de los organizadores, una intervención del PO, en esa misma asamblea, denunciando el pago al contado al FMI de Kirchner y Lula, y la invasión a Haití, y con la propuesta de un Frente Internacional de Lucha por la nacionalización del petróleo y la banca, bajo gestión de los trabajadores, fue aplaudida en tres oportunidades en los tres minutos de duración.

 

Chávez, desde su acto en un estadio (el Poliedro, ante unas 10.000 personas), intervino en el debate. Planteó que “sería terrible que el Foro se convierta en un festival anual de turismo revolucionario” y llamó a “acordar un programa de acción para impulsar estas luchas (antiimperialistas) en América Latina”. Se colocó a la izquierda del cubano Joel Suárez, del Consejo Hemisférico del Foro, que respondió que “no es malo que el Foro sea una feria, su opinión es parte de la diversidad”.

 

Claro que Chávez, después de este reto, de cantar La Internacional y enfervorizar a la multitud con el grito de “Socialismo o Muerte”, planteó su posición. “Han intentado clasificarnos en dos izquierdas. Los locos somos Fidel y yo, mientras Lula y Tabaré son estadistas”. Pero concluyó, tras las risas, que “todos juntos propinaremos una derrota a la derecha”. Rescató así a los más cuestionados en el Foro.

 

Los documentos que salieron de la “cocina” del Foro hablan contra las deudas externas, pero a favor de los gobiernos que las pagan al contado; denuncian el militarismo, pero apoyan a los Estados que invaden Haití; dan por muerto el Alca, mientras 29 tratados de libre comercio ya están firmados y se está pariendo el de Uruguay.

 

No salió una sola de las mociones de acciones internacionales por el retiro imperialista de Irak, de Haití y otras mociones vertidas en la asamblea final de las organizaciones sociales.

 

Intervención independiente

 

El Foro Alternativo, que tuvo lugar en ediciones pasadas del Foro, esta vez no existió. La mayor expresión independiente y de lucha se expresó en “La marcha de la luchas”: unos dos mil manifestantes campesinos, aborígenes y otros movimientos de lucha, que recorrieron cuatro kilómetros.

 

Los convocantes fueron los movimientos venezolanos Frente Campesino Ezequiel Zamora, Movimiento 13 de Abril, la Red de Medios Alternativos (con presencia numerosa) y organizaciones aborígenes que resisten la implantación expulsiva de una mina de carbón en el estado de Zulia. También estuvieron los campesinos de Yaracuy, que denunciaron al INTI, ente agrario nacional, “por defender a los terrófagos usurpadores de tierras campesinas, indemnizando a los supuestos dueños, reconociéndoles falsa propiedad que la cuarta república no se atrevió a avalar”, “por tratarse el 2006 de un año electoral”.

 

La combativa marcha culminó en un acto en regla, donde se denunció que la tierra sigue siendo de los terratenientes, que los burócratas del Estado no cumplen las promesas, que la banca sigue en manos privadas y que la deuda externa se paga puntualmente. Antes del acto se improvisó una verdadera asamblea popular alrededor de una intervención de Néstor Pitrola ante unos 50 manifestantes y dirigentes de la marcha.

 

Estos movimientos se mantuvieron virtualmente al margen del Foro. Pero varios de ellos, especialmente el Frente Ezequiel Zamora, participaron toda la semana de un Campamento Internacional y Antiimperialista, paralelo al Foro. Los “zamoranos” intervinieron en el Foro con tres de sus cinco principales dirigentes y una delegación de quince compañeros de distintas provincias, a través del taller organizado por el Polo Obrero sobre piqueteros y movimientos sin tierra en América Latina.

 

Este movimiento llegó a Miraflores, en junio pasado, con 7.500 campesinos de 15 estados venezolanos, para repudiar la cooptación de campesinos a través de la Coordinadora Campesina chavista. “Tranca carreteras” para obtener sus reivindicaciones y está organizando un movimiento o partido político (MBP) que ya intervino en el estado de Apure, alcanzando un alcalde en la localidad de Guastalito, contra el candidato de Chávez del MVR. Estiman que una parte importante de la abstención del 4 de diciembre pasado (75%) se debió a la frustración popular por promesas y reivindicaciones incumplidas, por parte de los “reformistas” de la V República, el partido oficial. De allí derivan la necesidad de una organización política independiente de campesinos, estudiantes y obreros.

 

Una escuela internacionalista

 

El PO, desde la marcha inaugural oficial, estuvo en la calle y en todos los ámbitos junto a los delegados, las organizaciones participantes y el pueblo venezolano con el periódico del CRCI. No exageramos si decimos que El Obrero Internacional, comprado por cerca del 10% de los asistentes (se vendieron casi 700), conocido, ofrecido y conversado con muchos más de los que lo compraron, fue “nota” del VI Foro. Se trató del único periódico internacional del evento. Con él, se vendieron en las mesas y debates más de 100 libros y revistas con las Tesis de la Refundación de la Cuarta.

 

Sobre ese eje, nos relacionamos con más de 15 grupos políticos de distintos países, tuvimos largas horas de reuniones, como la realizada con el Frente de Trabajadores del Cadivi, y se consignaron más de 150 mails para intercambio político.

 

Con varios agrupamientos de lucha, de diferente alcance, tuvimos reuniones de debate político y hemos trazado un plan de trabajo internacional hacia la Conferencia Latinoamericana que realizaríamos en agosto. En algunos casos, los participantes leyeron las Tesis y se inició su debate en el propio curso del Foro.

 

Nuestros “talleres” se realizaron en su totalidad, y tanto la mesa sobre piqueteros y trabajadores sin tierra como la de fábricas bajo gestión obrera, fueron un completo éxito por su concurrencia y por la altura del debate político llevado a cabo.

 

Hemos pegado un salto respecto de la intervención política en ediciones anteriores. La clave ha sido El Obrero Internacional, por su contenido y por su caracterización del proceso potencialmente revolucionario que atraviesa América Latina.

 

Los diez militantes que desarrollamos esta actividad, a la que se sumaron Osvaldo Coggiola y el grupo que edita Opción Obrera en Venezuela, llamamos a todas las organizaciones de la CRCI a tomar en cuenta esta experiencia política y reforzar el trabajo de traducción y lucha política con El Obrero Internacional.