Internacionales

14/10/2018

Chile: los estudiantes enfrentan los planes de criminalización de Piñera

La lucha contra el plan “Aula segura”

Los estudiantes secundarios chilenos han convocado a una “semana de desobediencia” a partir del 14 de octubre en rechazo del proyecto de “aula segura” de Sebastián Piñera que avanza en la represión del movimiento estudiantil. La convocatoria parte de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces).


La iniciativa de Piñera amplía las potestades sancionatorias de las autoridades y facilita la expulsión de estudiantes que cometan 'hechos de violencia', pasando incluso por encima de los reglamentos de las instituciones. Piñera se vale de las agresiones puntuales que han sufrido algunos profesores para elaborar una disposición represiva que apunta en realidad a criminalizar la lucha estudiantil, que es un tábano frente a las políticas de privatización educativa. El proyecto es tan irregular que la Comisión de Constitución del Senado, donde se encuentra en discusión, lo ha calificado como “inconstitucional” por violar el derecho al debido proceso, lo que ha obligado al Ejecutivo a prometer modificaciones.


El rechazo al proyecto incluye también a los sindicatos docentes, que vienen de un paro de 48 horas por un pliego de reivindicaciones incumplido por el gobierno (deuda salarial histórica, condiciones de trabajo, titularizaciones docentes, entre otros puntos).


El proyecto de “aula segura” no es la única iniciativa represiva en danza. El gobierno ya anunció el envío de otro proyecto que aumenta las penas por agresiones contra Carabineros, la fuerza de choque del Estado chileno contra las movilizaciones populares. 


Las medidas represivas de Piñera apuntan al disciplinamiento de una juventud levantisca. Este año hubo decenas de tomas de facultades impulsadas por el movimiento de mujeres contra los abusos sexuales. Esa misma juventud protagonizó una movilización de 50 mil personas en julio en Santiago por la legalización del aborto. A su vez, los jóvenes han salido a las calles contra el Estatuto Laboral Juvenil que avanza en los contratos basura.


El gobierno de Piñera necesita la represión para hacer pasar sus políticas de ajuste contra las masas. La derrota del plan “aula segura”, por eso, es importante también para toda la clase trabajadora trasandina.