Combativa marcha por Palestina

Los Bonasso y los Tumini, ausentes

El pasado lunes 17, una combativa marcha contra la escalada criminal sionista en Medio Oriente recorrió la Avenida de Mayo, con el protagonismo de un conjunto de organizaciones de las comunidades árabe, palestina y libanesa en la Argentina. Ese lunes, en horas de la mañana, estaba previsto que Kirchner recibiera al Consejo Mundial Judío, la jefatura internacional del sionismo, con soberanía sobre el Estado de Israel.


Concurrieron el PO, el MST, el PCR y varias organizaciones piqueteras. Una combativa presencia de mujeres y jóvenes de la comunidad sirio libanesa se encargó de marcar a fuego a los cómplices externos e internos de la masacre. “Cuando querramos referirnos a un campo de concentración, ya no sólo tendremos como ejemplo al nazismo. También a Guantánamo, a Irak, a Afganistán, y a Gaza”. Una compañera no cesaba de repetir ante los medios: “¿adónde está el Presidente, por qué calla, por qué callan él y todos sus funcionarios?”. En el acto improvisado frente a la Embajada de Israel, la mayor chiflatina se la llevó Anibal Fernández, quien anticipó esa mañana, que reforzaría el vallado de la plaza de mayo contra “algunos fundamentalistas islámicos”.


“Compañeros, vamos a Plaza de Mayo”. Era un planteo contra el gobierno argentino, por el previsto tratado comercial entre Israel y el Mercosur.


El PO marchó junto a los nacionalistas árabes, palestinos y libaneses, contra el terror imperialista.


Pero, ¿dónde estaban los “nacionales” argentinos? ¿dónde estaban los montoneros de Kirchner? ¿Dónde estaba Bonasso, Ceballos o alguno de los ciento sesenta diputados kirchneristas?


El kirchnerismo volvió a revelar que, como referencia popular o, si se quiere, “nacional”, es un frasco completamente vacío.


El próximo 25 de julio, marcharemos masivamente en Buenos Aires, otra vez.