Cruje el vaticano del futbol

La inmensa crisis desatada en la FIFA con denuncias irrefutables sobre corrupción de sus dirigentes ha sorprendido al mundo, pocos días antes de una nueva re-re-reelección de su presidente.

La corrupción de la FIFA es una de las noticias menos novedosas del mundo. Viene siendo denunciada, y nunca probada, desde los tiempos del Joao Havelange Para encontrar la raíz de esta fenomenal cadena de corrupción hay que entender que la impunidad de la FIFA tiene que ver con la aceptación de sus propios estatutos y no sólo con la reelección indefinida de sus presidentes, resultante también de estos estatutos.

La justicia “divina” de la FIFA
Los países participantes de la FIFA contraen obligaciones que colocan a la misma por encima de la justicia ordinaria de cada país y la sola apelación a algún tribunal implica la desafiliación a este vaticano del futbol mundial.

Entre las obligaciones de los países participantes figura que los mismos “Se comprometen a reconocer al TAD (Tribunal Arbitral de Disciplina) como instancia jurisdiccional independiente, y se obligan a adoptar todas las medidas necesarias para que sus miembros, jugadores y oficiales acaten el arbitraje del TAD. Esta obligación se aplica igualmente a los agentes organizadores de partidos y a los agentes de jugadores licenciados.”

“Se prohíbe en el capitulo de “Obligaciones” del estatuto el recurso ante tribunales ordinarios, a menos que se especifique en la reglamentación FIFA. Queda excluido igualmente el recurso por la vía ordinaria en el caso de medidas cautelares de toda índole.”

Como se ve la FIFA ha armado su propia justicia mundial, una Justicia divina con un estatuto que garantiza la más plena impunidad. En los años 80 en la Argentina el club Talleres de Córdoba intentó apelar a los tribunales y fue disuadido por Grondona de hacerlo, pues quedaba fuera del mundo del futbol. Así ha pasado con decenas de países en conflicto con la FIFA: rechazar un fallo de la Federación es hoy equivalente a la muerte del club y del país federado.

Soborno “para todos y para todas”
Llama la atención que en las denuncias de la justicia de los Estados Unidos sólo aparezca como cuestión central los sobornos por las adjudicaciones de sedes. Hay que señalar que uno de los elementos claves de esta fenomenal corruptela (así lo hemos denunciado en Prensa Obrera ante el mundial de Sud África) es la adjudicación de la comercialización de marcas exclusivas de la FIFA.

En los últimos años, se registró una marcada preeminencia de las marcas estadounidenses donde Coca Cola, Nike, Mac Donald han entrado de lleno en las preferencias de la FIFA en desmedro de las marcas europeas El sistema de adjudicaciones de los sponsor mundiales tampoco tiene control externo alguno, sigue los mismos pasos estatutarios de justicia propia de la FIFA. Las adjudicaciones a las marcas seguramente contengan un mayor grado de corrupción que las propias adjudicaciones de las sedes con el agravante de que muchas de ellas tercerizan con trabajo esclavo y de niños la confección de sus prendas, como ha sido denunciado en todo el mundo.

Una muestra de la “justicia divina” de la FIFA es la cláusula de autorizaciones a la comercialización de sonido y televisación de los partidos
”La FIFA, sus miembros y las confederaciones tienen la responsabilidad exclusiva de autorizar la distribución de imágenes, sonidos y otros datos de partidos de fútbol y actos bajo su jurisdicción, sin ningún tipo de restricción respecto al contenido, tiempo, lugar y aspectos técnicos y legales”.

En estos considerandos entran todos los negocios mundiales de la radio y televisacion de copas continentales y mundiales y sus respectivas cometas Los argentinos hasta ahora involucrados actuaron amparados en estas normas de la FIFA.

No va más
La FIFA ha ido muy lejos en la impunidad. Sólo como ejemplo para entender la corrupción que impera en las propias elecciones de la FIFA hay que decir que la Concacaf tiene 35 miembros contra 10 de Sudamérica y que África tiene 54 contra 51 de Europa Al amparo del negociado con personajes de centenares de republiquetas se ha armado el sistema de reelección indefinida de la FIFA.

Gracias a este sistema, Blatter volvió a ser reelecto este viernes. En esta puja de negocios, algunas corporaciones podrán ser desplazadas en desmedro de otras. Pero el régimen camarillesco construido para gerenciar estos negocios, y que ha subordinado el fútbol a sus intereses, continúa en pie.