Detrás de Lula, Petrobras

Desde hace años, Bolivia exporta gas a Brasil. Un dato poco conocido es que uno de los factores que llevó a la radicalización de la entrega del gas a los Estados Unidos por Sánchez de Lozada, fue la presión de la Petrobrás de Lula por la revisión a la baja (en precio y volumen adquiridos) del contrato de compra de gas boliviano por el Brasil.


La “movida” brasileña fue calificada como una “guachada” incluso por un experto en hidrocarburos brasileño (Correio Braziliense , 15/10): “En enero, Petrobrás mantuvo la suspensión de pagos de 100 millones de dólares, para presionar a los bolivianos a reducir el precio, poniéndose en default”, pese a que Brasil tiene un crónico problema energético. Al servicio de esa presión mezquina, que revive las infamias de las oligarquías regionales contra Bolivia, estuvo el alardeado descubrimiento de nuevas reservas gasíferas por el Brasil, en la cuenca de Santos.


En setiembre, la garrafa de gas boliviano le explotó a Lula en las manos.