El jefe de Policía de Sharon


La primera medida de gobierno del nuevo presidente palestino Mahmoud Abbas (Abu Mazen) fue ordenar a los jefes de los servicios de inteligencia que desplazaran sus efectivos en Gaza y Cisjordania para impedir los ataques armados contra Israel. Al mismo tiempo, ordenó la unificación de los diferentes servicios de inteligencia y seguridad, y ordenó la integración de las Brigadas de Al Aqsa (de Al Fatah, su propio movimiento) a las fuerzas de la Autoridad Palestina.


 


El despliegue de las tropas palestinas “fue pactado por los generales israelíes y palestinos” ( El País , 22/1). Antes de este acuerdo, el jefe de la seguridad preventiva en la Franja de Gaza, se había declarado “dispuesto a adoptar medidas concretas sobre el terreno” contra los grupos que violen la orden de no atacar a Israel ( Corriere della Sera, 18/1).


 


Shimon Peres, canciller israelí, declaró que “los primeros pasos de Abu Mazen son impresionantes; mucho mejores de lo que se preveía” ( El País , 22/1).


 


Hamas, contra quien está dirigido este despliegue, anunció que “no dispararán mientras continúen las negociaciones” y “ha dejado sobre la mesa un documento en el que se compromete a reconocer el Estado de Israel, aceptar las fronteras de 1967 y compartir la capitalidad de Jerusalén, si a cambio se pone fin a la ocupación y se acepta la proclamación del Estado palestino”.