El restauracionista Zyuganov e Izquierda Unida

El 7 de junio, “Guennadi Zyuganov, presidente del Partido Comunista de la Federación Rusa (Pcfr) y jefe de la principal fuerza opositora (Unión Patriótica del Pueblo de Rusia)” (Propuesta, 11/6) visitó la sede del Comité Central del Partido Comunista Argentino (Pca). Fue homenajeado por Patricio Echegaray, secretario general del Pca y”sostuvo un encuentro en el que participaron, a salón lleno, dirigentes y militantes de la Izquierda Unida, del Espacio de Puán y de otros partidos y personalidades de izquierda” (ídem). Entre los presentes se encontraba Vilma Ripoll, en representación del Mst, un partido que se reclama trotskista. El periódico del Mst (Alternativa, 17/6) comenta dicha entrevista bajo el título: “Encuentro con Ziuganov. Distintos puntos de vista sobre Rusia”.


En la entrevista, Ziuganov señaló que “para la elaboración del programa del Pcfr… hemos estudiado atentamente la experiencia de la República Popular China, especialmente lo referido a la zona libre de Shangai, las raíces del llamado milagro japonés, particularmente lo desarrollado en la empresa Toyota, la esencia del Estado social en Alemania y lo fundamental de la política establecida por el gobierno de los socialistas y comunistas en Francia…” (ídem, Propuesta). Todas ‘experiencias’ de ‘desarrollo’ , del sojuzgamiento de los pueblos y de superexplotación de los trabajadores. Ziuganov las combinó con el apoyo a “la economía mixta”. Proclamó como ‘ideal’ suyo un capitalismo “transformado” que “apoye la socialización del mundo, dedicando el 30% de los presupuestos a los fines de la educación, la salud, al servicio de la comunidad”. Para superar “la desintegración de la URSS” tomó como modelo “el Acuerdo de Libre Comercio en América el Norte (que) también se integra (con) el Cono Sur de América”. Es decir, el completo vasallaje de las naciones pobres por el imperialismo.


Todo esto fue recibido por el PC argentino y algunos de sus corifeos de manera entusiasta, echando una luz definitiva sobre el carácter de clase de Izquierda Unida.


El Mst, por su parte, dice que Ziuganov denunció “el gobierno de Yeltsin, el ataque al nivel de vida del pueblo ruso, el fraude en las privatizaciones y lo que denominó ‘capitalismo mafioso’. En sus propuestas, no indicó ningún camino de ruptura con el proceso de restauración capitalista”. Pero en la reunión con Ziuganov, Vilma Ripoll no denunció que el PC ruso ha votado todas las leyes anti-obreras de Yeltsin, y que incluso reclamó ingresar al gobierno en oportunidad de la última crisis que derribó al primer ministro Chernomydin. Cuando Ziuganov opinó —ante una pregunta— la barbaridad de que “Yeltsin es un seguidor de Trotsky”, la Ripoll habría señalado que “lamentaba(!!!) esa injusta comparación” ya que “Trotsky había luchado siempre contra el ingreso del capitalismo en la URSS, que es lo que hace Yeltsin”.


La dirección del Mst fue, hay que admitirlo, muy ‘diplomática’ con Ziuganov. Y esto es explicable, ya que quiere hacer con el PC e IU el eje de una ‘reconstrucción estratégica’ de la izquierda no solamente en Argentina sino también en España y otros países.