A pesar de su mayoría absoluta en el Parlamento, la discusión del Presupuesto y el anuncio de los últimos recortes han abierto una crisis política: se ha puesto en debate el llamado ‘Estado de las autonomías' y ha hecho resurgir el reclamo de autodeterminación nacional. El tema es quién se hace cargo de llevar adelante los recortes: el gobierno central estableció un agresivo plan de ajustes por diez mil millones de euros en salud y educación sobre las comunidades autónomas. Las que no sean capaces de alcanzar la reducción de déficit, serán intervenidas.

Las once regiones controladas por el PP firmaron el plan de austeridad del gobierno, pero otras, como Andalucía y el País Vasco, gobernadas por el PSOE, se han declarado ‘en rebeldía'. Convergència i Uniò, el partido de la burguesía de Cataluña, se ha negado a apoyar los Presupuestos presentados por el PP y reclama que la recaudación de impuestos de Cataluña quede a cargo del gobierno autonómico. Según los medios, el planteo independentista cosecha actualmente las simpatías del 44% de los catalanes frente a un 24% en la década de 1990.Pero un nuevo ‘pacto fiscal' para Cataluña, una de las regiones más ricas e industrializadas, precipitaría la declaración de quiebra al Estado español. Esperanza Aguirre, dirigente del PP madrileño, planteó directamente que el "Estado de las autonomías fracasó" y se convirtió "en un modelo económicamente insostenible en tiempos de crisis".

En este cuadro se procesa, además, la más grave crisis de la Monarquía desde su reinstalación a la caída del franquismo. Al escándalo de la excursión del rey Juan Carlos a África se suma la gravísima situación judicial que enfrenta Iñaki Urdangarín, su yerno, quien posiblemente vaya preso por malversación de fondos, en un conjunto de negociados que involucran a toda la Casa Real.

Hace unos meses, caracterizamos que "la gigantesca bancarrota capitalista está resquebrajando el régimen político de las ‘autonomías' forjado por el franquismo, el stalinismo y el PSOE en los mentados Pactos de la Moncloa -es decir, todo el edificio político de esa cárcel de pueblos que es la monarquía española" (PO Nº 1.198). El pasado 5 de mayo, un editorial del conocido historiador Santos Juliá en El País, se sorprende al advertir que "en Madrid y en Barcelona, por una vez de acuerdo, parecen haber dado con la clave: el Estado de las Autonomías, he ahí la raíz del problema".

El 1º de Mayo han vuelto a salir a la calle millones de personas en todo el país: al movimiento de los ‘indignados' se ha sumado ahora una presencia más activa de los sindicatos.