Estados Unidos: Triunfo de los trabajadores de los fast food

Después de que el movimiento por el salario mínimo de 15 dólares (Fight for 15) ocupara las calles de Estados Unidos enfrentando, entre otras, a empresas de comida rápida y a Walmart (el mayor empleador privado del país), el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, aprobó el salario mínimo para los trabajadores de los locales de comida rápida, igualando empresas como Facebook y Aetna. Nueva York es la sexta ciudad que aprueba el reclamo, después de Seattle, Los Angeles, San Francisco, Emeryville y SeaTac, abarcando a un millón de trabajadores. El actual salario de 7,25 dólares la hora; esto es, 12.180 dólares anuales (35 horas semanales), cubre sólo la mitad de la canasta básica (vital), según el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS); lo cual indica que la línea de pobreza en 2015 para una familia tipo es de 24.250 dólares (aspe.hhs.gov).


 


En la ciudad de Nueva York, la suba será gradual hasta alcanzar 15 dólares la hora en 2018. Aunque el aumento proyectado no cubriría la canasta familiar "oficial", el movimiento obrero ha dado un paso muy importante en la lucha contra la precarización y superexplotación laboral, como también en favor de la sindicalización y organización de millones de trabajadores. Desde "Fight for 15", llamaron a todos los trabajadores del país a organizar una nueva marcha para nacionalizar la medida.


 


Contra ortodoxos y heterodoxos, decimos que no se necesita ni subir los precios, ni aumentar la productividad (explotación), ni despedir a medio millón, ni reducir el empleo joven, para aumentar el salario mínimo. Las cadenas de comida rápida obtuvieron un aumento de ganancias de 14,5% desde 2010, mientras los salarios cayeron un 3.6% en el mismo período, según indica Irene Tung del National Employment Law Project (www.nelp.org, 5/6). De 1973 a 2013, la productividad creció un 74%, mientras que los salarios sólo un 9%, según el Economic Public Institute. El porcentaje de participación de los trabajadores en el PBI, en el mismo período, cayó del 50% al 43,5%.