“Irene”: Primera flota judía contra el bloqueo a Gaza

La primera flotilla judía que se propone romper el bloqueo sionista y llevar ayuda humanitaria a Gaza zarpó de Chipre el domingo pasado. La embarcación, llamada “Irene”, navega bajo bandera británica con diez pasajeros, todos judíos procedentes de Reino Unido, Estados Unidos, Alemania e Israel. Richard Kuper, director de la organización inglesa Judíos por la Justicia para los Palestinos, aseguró que el propósito es poner en evidencia que “las políticas del gobierno israelí no son apoyadas por todos los judíos”.

Entre los tripulantes se encuentran Reuven Moskovitz, sobreviviente del Holocausto, y el israelí Yonatan Shapiro, que integra la organización de reservistas del ejercito israelí que se niegan a intervenir en los territorios ocupados.

Shapiro grafiteó un monumento al gueto de Varsovia comparándolo con el gueto de Gaza.

Los tripulantes informaron que no enfrentarían al ejército israelí, aunque les impidiera llegar a Gaza. Los sionistas avisaron que les cerrarán el paso y que, si insisten, serán detenidos.

El 22 de septiembre, el informe dado a conocer por la Comisión Investigadora del Consejo de Derechos Humanos de la ONU estableció que el asalto del ejército israelí, el 31 de mayo en aguas internacionales, a la flotilla que llevaba ayuda humanitaria constituyó una “grave violación de la ley humanitaria internacional”. El informe asegura que “hay claras pruebas para apoyar acusaciones de los siguientes crímenes de acuerdo con el artículo 147 de la Convención de Ginebra: asesinato premeditado, tortura o trato inhumano y causar a propósito gran sufrimiento o heridas graves”. Se dice también que el ataque israelí, que provocó la muerte de nueve activistas solidarios turcos (uno de ellos turco-estadounidense), fue “desproporcionado y de una increíble e innecesaria violencia” y se agrega: “El ataque conllevó un nivel inaceptable de brutalidad, una conducta que no puede ser justificada sobre bases de seguridad u otras”.