Italia: “Fuera Berlusconi” un reclamo nacional

Tanto la prensa europea como la italiana coinciden en prever que el fin de Berlusconi está cerca: “Silvio se cae”, pronosticaba hace unos días el Financial Times (29/4) en una nota editorial, en alusión a la paliza que recibirá Berlusconi en las próximas elecciones europeas de junio.


Al masivo repudio a la intervención italiana en Irak se suman la catarata de juicios por corrupción que enfrenta Berlusconi y, por sobre todo, la marcada tendencia del capitalismo italiano a la bancarrota: la crisis de la Fiat, en el 2002, fue seguida, en cascada, por la quiebra de dos de los mayores pulpos italianos, Cirio y Parmalat.


Como consecuencia de estas bancarrotas, las grandes patronales italianas le han dado la espalda. En la reciente asamblea de Cofindustria (la central empresaria), fue repudiado por los propios capitalistas. “Berlusconi está lejos de ser la Thatcher de Italia”, advierte el diario de la City de Londres, denunciando su incapacidad para reducir la deuda pública (106% del PBI) y su fracaso en implementar la flexibilidad laboral y la “reforma jubilatoria” (“Italia es el país de la UE que menos progreso registra en las reformas”). Para peor, dice el diario inglés, los conflictos en la industria automotriz (varias plantas de Fiat se encuentran paradas) y en otros sectores (Alitalia, transporte público) “sugieren que la historia de antagonismo industrial (es decir, de combatividad obrera) puede repetirse una vez más” (ídem).


Por otro lado, una parte sustancial de la clase media se ha rebelado, como consecuencia de las estafas de los bancos protegidos por Berlusconi con los bonos de las quebradas Cirio y Parmalat y con los la deuda externa argentina.


El gobierno de Berlusconi se viene desmoronando desde hace meses. Pero el Olivo, centroizquierdista, se empeña en evitar la caída anticipada de Berlusconi y quiere asumir el relevo recién en las elecciones parlamentarias, dentro de dos años.


La consigna “Fuera Berlusconi” está planteada para todas las clases sociales en Italia. Es un punto de partida para delimitar la política revolucionaria respecto de la centroizquierda, en el terreno de la crisis política y de la lucha. Permite desarrollar esta delimitación sin caer en la renuncia puramente doctrinaria de la colaboración de clases que impulsa la izquierda democratizante italiana.