La “cumbre” de presidentes del Mercosur, que se reunirá en Córdoba en estos días, seguramente tendrá una agenda muy distinta a las que dictan las necesidades de los pueblos de Latinoamérica, y por la cual han ganado las calles los campesinos de Brasil en su lucha contra los latifundios, el insurrecto pueblo boliviano exigiendo la nacionalización de los hidrocarburos y del agua, los trabajadores petroleros de Ecuador que lograron la expulsión del pulpo Oxy, el pueblo de Gualeguaychú en su lucha contra las pasteras contaminadoras, los miles de estudiantes chilenos que ganaron las calles contra la ley de educación y los miles de trabajadores de toda la región que luchan a diario contra la miseria salarial, la precarización del trabajo y la pauperización de las condiciones de vida.

¿Cuál debería ser esa agenda?

Una “cumbre” comprometida con los intereses de los pueblos de Latinoamérica debería discutir el inmediato retiro de las tropas de ocupación de Haití y exigir el respeto a la autodeterminación nacional de ese país, pisoteada por el imperialismo yanqui.

La “cumbre” debería alzar su voz contra la masacre que está perpetrando el Estado sionista de Israel contra los pueblos de Palestina y del Líbano y rechazar cualquier acuerdo de libre comercio con el Estado masacrador de los pueblos árabes.

La “cumbre” debería discutir la nacionalización sin pago de los recursos naturales y energéticos, y la integración energética independiente de los intereses capitalistas, expulsando de la región a los pulpos petroleros que saquean a las naciones.

Una cumbre que defienda los intereses populares debería discutir la expropiación de los latifundios y de las empresas contaminantes, para terminar con la degradación del suelo y los recursos naturales por parte de las pasteras, las forestadoras y las sojeras, entregando la tierra a los trabajadores rurales para su explotación.

De la misma manera, la cumbre debería terminar con la emisión de bonos de la deuda externa que son utilizados para pagar la deuda vencida y de esa manera acabar con el re-endeudamiento y el saqueo de los recursos de nuestros países, y colocar estos recursos para establecer un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar en todos los países de la región.

Pero la agenda de los presidentes de la “cumbre” se propone la “reconstrucción de la burguesía nacional” de cada uno de los países, sobre la base del hundimiento en la miseria de nuestros pueblos, como consecuencia del capitalismo mundial y nacional.

Para que exista una agenda que contemple los intereses de los pueblos de Latinoamérica, llamamos a luchar por la expulsión del imperialismo, por el gobierno de los trabajadores y por la Unidad Socialista de América Latina.

Partido Obrero – MST-El Socialista – Partido de los Trabajadores Socialistas – Casa del Pueblo-Unidhos – Movimiento al Socialismo