Los revolucionarios de Turquía, la lucha contra el virus y la explotación capitalista

Texto del DIP

en nombre de la Comisión Internacional DIP

El Partido Revolucionario de los Trabajadores de Turquía viene llevando a cabo una enérgica campaña en defensa de los intereses de la clase obrera, en medio de la pandemia de coronavirus. Compartimos un texto de los compañeros.


¡Estamos en dos guerras, no en una!


Hasta ahora, el DIP emitió cuatro declaraciones en turco sobre el coronavirus y publicó tres evaluaciones críticas adicionales sobre diferentes aspectos de la cuestión en sus medios de comunicación  electrónicos. La primera declaración, un plan de acción general titulado "¡Contra el coronavirus, prioridad no a las ganancias, sino a la defensa de la vida!", se publicó el 10 de marzo, antes de que el primer caso oficial de coronavirus, el 11 de marzo, en territorio turco fuera admitido. Este plan de acción cubrió muchas áreas, incluidas las demandas relativas a la provisión de todos los artículos médicos básicos necesarios para todos por parte del Estado en forma gratuita, la expropiación de todas las empresas que se oponen a ese camino, la reordenación de las condiciones laborales y de salud en todas las fábricas y los lugares de trabajo, la provisión de medidas especiales de protección a poblaciones vulnerables en instituciones atestadas, como las prisiones y cuarteles, la protección de los refugiados, los solicitantes de asilo e inmigrantes que viven en condiciones extremas, el trabajo y las condiciones de protección sanitaria de médicos,  y de todos los trabajadores de la salud, la provisión inmediata de más autobuses a las empresas municipales de transporte público para evitar aglomeraciones en las condiciones de viaje y muchas otras.


Para poner todo esto en práctica, el plan de acción abogó por la supervisión de todas las medidas por parte de los sindicatos y las organizaciones profesionales del personal médico, la formación del control de los trabajadores en fábricas y lugares de trabajo para supervisar las medidas adoptadas para proteger trabajadores de las condiciones de trabajo y de viaje en entornos atestados (aglomerados) , y de mantener alejado a la policía y el ejército de ambas medidas, la de desinfección y supervisión de las prácticas de "quedarse en casa", exigiendo en cambio, la movilización de estudiantes universitarios de medicina y enfermería.


Inmediatamente después del plan de acción, el DIP realizó un análisis de la caída de los mercados de valores en todo el mundo y en Turquía, colocando el efecto del coronavirus en su lugar, es decir no más que un detonador y enfatizando la situación ya frágil de la economía mundial capitalista, apuntalada artificialmente desde el inicio de la Tercera Gran Depresión en 2008.


Después de la admisión de la presencia de casos de coronavirus en Turquía, rápidamente la situación se convirtió en la que "quedarse en casa" era la regla para las clases altas y medias altas, ya que muchos podían trabajar desde sus casas, pero se enviaron trabajadores y obreros en masa a las calles, viajando en autobuses municipales atestados de gente o bien en autobuses especiales para trabajar en fábricas y diferentes lugares de trabajo sin ninguna medida de higiene.


El DIP salió inmediatamente el 14 de marzo con lo que llamamos la "Declaración de fábricas" que exige prioridad a la vida de los proletarios sobre las ganancias, presentando muchas medidas, incluida la reducción de la jornada laboral para que ambos padres puedan cuidar a los niños alternativamente, ahora que las escuelas fueron cerradas. La "Declaración de fábricas" se distribuyó en forma de folletos o, más ajustadamente para la emergencia de salud y evitar el contacto entre las personas, como afiches en muchas ciudades de la clase trabajadora, incluidas fábricas cercanas.


La primera muerte en Turquía por el coronavirus se produjo el 17 de marzo, inmediatamente después de lo cual Erdoğan apareció en televisión para desplegar un "Escudo" que constaba de un paquete de medidas económicas ante el colapso de los mercados financieros. Solo 2 mil millones de liras turcas de un total de 100 mil millones se reservaron para familias en apuros, el resto irá a rescatar a capitalistas, grandes y pequeños. El DIP criticó esa misma noche, el 18 de marzo, a este "Escudo para los capitalistas" en su sitio web y desde entonces ha hecho hincapié en todas sus declaraciones acerca de cómo la asignación de todos los recursos públicos va a los rescates de los capitalistas más que para la  lucha contra el virus.


Ese mismo día, el DIP también emitió una nueva declaración sobre la difícil situación de los trabajadores de la salud titulada "Los trabajadores de la sanidad luchan en primera línea por la salud de las personas y sus demandas deben cumplirse de inmediato", llamando, entre muchas acciones urgentes concretas, a la expropiación de fábricas textiles para producir ropa especial de todo tipo para trabajadores de la salud.


El 20 de marzo, el DIP publicó en sus medios de comunicacion una crítica a la renuencia del gobierno a tomar medidas sanitarias en las cárceles, que pronto demostrarán ser focos de infección por coronavirus, matando a muchos de los más de 300 mil presos, muchos de estos presos son los presos políticos, los periodistas y otros detenidos por "delitos" de opinión, no están condenados, pero están detenidos en espera de juicio, lo que significa, legalmente hablando, que se debe presumir que son inocentes. Por lo tanto, esta política de mantener a los detenidos políticos como rehenes en prisión podría convertirse en una política de "dejar morir" a personas inocentes.