Más que el matrimonio

Se levanta la comunidad trans de Estados Unidos


La conquista del matrimonio igualitario es el producto de una lucha de años del movimiento de la diversidad sexual que lleva casi 50 años. Al mismo tiempo, los fundamentos de la legalización bregan por la “protección de la familia” (a pesar de ser) homosexual, y no por el libre desenvolvimiento de la vida sexual y/o amorosa de cada quien.


 


Paradójicamente, días antes de la noticia del matrimonio, otra ocupó los portales del mundo: Jennicet Eva Gutiérrez, una activista trans e inmigrante, interrumpió al presidente Obama en un acto por el día del orgullo gay exigiendo que cesen las deportaciones y los abusos a mujeres trans inmigrantes en los centro de detención.


 


Obama rechazó la interrupción. Jennicet fue abucheada por el coro de varones gay (!) que asistía al acto mientras los guardias la acompañaban a la salida.


 


La organización Familia Trans Queer Liberation Movement informa que en los centro de detención las mujeres trans son el 1%, pero, al mismo tiempo, víctimas del 20% de los abusos cometidos. Son encarceladas junto con hombres, obligadas a usar el baño junto con ellos y objeto de múltiples vejaciones. Tras la acción de Jennicet, el gobierno federal emitió un nuevo protocolo para tratamiento de las personas trans en el sistema penitenciario. Pero Familia y otras organizaciones reclaman el cese completo de las deportaciones y la persecución.


 


En Argentina, muy a pesar de la ley de Identidad de Género de 2012 (reglamentada con su plan de salud trans recién este año), las personas trans viven una situación no menos peor. La esperanza de vida es de 35 años producto de la expulsión temprana del hogar, la persecución policial, la discriminación y la prostitución, la casi única alternativa laboral para las mujeres trans. Las que llegan a los 40 años lo hacen como sobrevivientes del silencioso genocidio que venimos denunciando.


 


Contra el monólogo del #LoveWins en las redes y en las calles se va abriendo paso la lucha por arrancarle al Estado todos los reclamos de la comunidad LGBTI que, lejos de vacacionar en cruceros tropicales, sufre el peso de la explotación y la opresión. En definitiva, un reclamos que vaya #MoreThanMarriage (más que el matrimonio). Nuestra agrupación LGBTI 1969 está comprometida con esa lucha.