En la última sesión del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires los consejeros estudiantiles de la Unión de Juventudes por el Socialismo presentamos un proyecto en rechazo a la intervención militar de Israel en la Franja de Gaza. El objetivo: sumar a la Universidad al repudio internacional contra la masacre que está perpetrando el Estado sionista.

Ante esta iniciativa, la gestión de la UBA rechazó no sólo aprobar sino incluso debatir el proyecto, argumentando que el planteo presentado por la mayoría estudiantil “no era de urgencia y debía presentarse por mesa de entradas”. Detrás de este absurdo argumento se encolumnaron todos los sectores políticos que cogobiernan la universidad: radicales, kirchneristas, macristas y binneristas. Al igual que en la política nacional, mantienen un silencio cómplice.

Mientras en todo el mundo se desarrolla una campaña internacional en defensa del pueblo palestino -que incluye a personalidades de la cultura, académicos, deportistas y otros- la UBA le da la espalda con un argumento administrativo y vergonzoso y se coloca, así, en el campo de los gobiernos que plantean el “derecho a defenderse” de Israel, el eufemismo que encubre una verdadera limpieza étnica. La universidad debe sumarse a la pelea por derrotar este intento de genocidio.

Gabriel I. Consejero superior UBA Ujs partido obrero