Puerto Rico: todas las paredes dicen “Ricky vete”

Marchas multitudinarias reclaman la renuncia del gobernador

El pueblo boricua continúa en las calles por la caída del gobierno delicuente y títere del imperialismo.

Puerto Rico está encendido. El martes hubo casi un millón de personas en las calles y un paro. La semana previa había tenido lugar una movilización de cerca de 100 mil personas, pico de una semana de marchas masivas exigiendo la renuncia del gobernador “Ricky” Roselló, que debió hacer frente a los gases lacrimógenos y las balas de goma. “To'as las paredes dicen ‘Ricky vete’”, canta el músico Bad Bunny, en una potente canción que compusieron junto a Residente e iLe (los hermanos René e Ileana Pérez).


El disparador de esta asonada popular fue la filtración de este fin de semana, por parte del Centro de Periodismo Investigativo (CPI), de un chat privado de Telegram de Roselló con una decena de sus colaboradores, plagado de homofobia y misoginia, de preparativos mediáticos contra opositores y hasta de bromas sobre los miles de muertos tras el Huracán María de 2017. También, como lo profundizó un informe el CPI, de enjuagues con lobistas empresariales allegados a Roselló, brindándoles información confidencial en beneficio de sus clientes y cocinando el otorgamiento de contratos en las tareas de reconstrucción del país y exenciones impositivas.


El escándalo obligó a la renuncia de dos funcionarios implicados en el chat, en lo que echa nafta al fuego de la crisis política: entre ellos cayó el Secretario de Estado Luis Rivera Marín, quien debía reemplazar a Roselló en caso de dimisión.


El TelegramGate, como se ha dado en llamar, se suma al arresto la semana pasada de la ex secretaria de Educación Julia Keleher y la ex administradora de Seguros de Salud, Angela Avila, junto a subcontratistas del gobierno, envueltas en una corruptela con fondos federales por 15,5 millones de dólares; y llega tras las denuncias del ex secretario de Hacienda, Raúl Maldonado, acerca de una mafia institucional enquistada en el gobierno.


Las grandes marchas han sido llamadas por gremiales y otras organizaciones, y cuentan con una composición heterogénea, de la que se han destacado algunos aspectos coloridos como la adhesión de una pléyade de artistas conocidos internacionalmente -a los mencionados se suman Ricky Martin, Luis Fonsi y Benicio Del Toro- y las marchas de miles de motociclistas encabezadas por el influencer “Rey Charlie”.


Hastiados


El escándalo del chat ha vuelto a detonar la movilización de un pueblo hastiado, con 40% de pobreza y sometido al desangre por parte del gobierno de Estados Unidos, del que depende colonialmente desde fines del siglo XIX, siendo hace décadas un “Estado asociado” sin autonomía nacional.


Con una deuda colosal y una recesión económica que lleva doce años, Puerto Rico entró en default en junio de 2016 y declaró la quiebra en mayo de 2017, en lo que amenazaba con desatar una reacción en cadena temida por los capitalistas yanquis. Combinado con una Junta de Supervisión Fiscal creada en 2016 por Barack Obama, el gobierno ha llevado adelante un ajuste voraz en pos del pago de la deuda, avanzando en la privatización de la compañía eléctrica y el ajuste en pensiones y en la salud. Mientras se hacía de un sueldo equivalente al del Rey de España, la detenida Keleher fue artífice del cierre de 263 escuelas públicas para reemplazarlas por escuelas concertadas (público-privadas), con el despido de 5 mil docentes, y del aumento de la matrícula universitaria.


Que los gobiernos local y yanqui son una mafia contra el pueblo boricua lo mostró con creces su acción ante el Huracán María, que incluyó el intento de otorgar contratos millonarios de reconstrucción a empresas sin experiencia, y acrecentó exponencialmente los efectos del azote. 4.645 muertes, eliminación del suministro eléctrico por meses, destrucción de gran parte de la infraestructura del país. Los chats filtrados reconocen el embellecimiento gubernamental de los planes de vivienda (¡hay casas que siguen sin tejado!) y el taponamiento de cadáveres en la morgue.


Trump, los demócratas y la independencia


Roselló, ligado al Partido Demócrata estadounidense (PD) y promotor de la candidatura de Hillary Clinton, rápidamente se sometió a los designios ajustadores del republicano Trump, quien, sin embargo, no ha dejado de atacarlo. En un tuit de estos días, el magnate protestó por la corrupción y señaló que se habían despilfarrado en envíos a la isla 92 mil millones de dólares (una mentira flagrante: sólo se aprobaron 42 mil y fueron entregados 13). La presencia del FBI en la investigación contra Keleher abona la idea de una mano de Trump detrás de estas filtraciones, interesado en cortar de cuajo con las remesas a Puerto Rico.


Los demócratas, corresponsables de esta masacre social, buscan contener la movilización en el reclamo contra Roselló y la corrupción y capitanear su relevo. Se destaca en esto la alcaldesa de la capital puertorriqueña Carmen Yulín Cruz, ligada a Bernie Sanders; también han pedido la renuncia de Roselló los candidatos a presidentes norteamericanos por el PD Elizabeth Warren y Julián Castro.


El pueblo boricua continúa en las calles por la caída del gobierno delincuente y títere del imperialismo. En esta lucha está planteado desenvolver una alternativa propia, por el no pago de la deuda, la independencia de Puerto Rico y un gobierno de los trabajadores. Por la unidad socialista de América Latina.