Saludos internacionales al XXVIII Congreso del Partido Obrero

Foto: Andrés Ojo

El XXVIII Congreso del Partido Obrero recibió saludos desde Cuba, México y Brasil. Además, contó con la presencia de compañerxs de Chile (Fuerza 18 de Octubre) y Perú (Agrupación Vilcapaza). A continuación, compartimos los textos que nos llegaron.

 

“Comenzó a forjarse una izquierda crítica cubana cada vez más radicalizada”

Camaradas del Partido Obrero:

Para el estalinismo, el internacionalismo representaba inevitablemente la supeditación a la Unión Soviética. Cuando tenían lugar los congresos de los Partidos Comunistas en aquellos países supuestamente socialistas, la burocracia soviética enviaba representantes políticos que en realidad funcionaban como supervisores. Todo lo contrario de lo que sucedía en la Internacional Comunista cuando era conducida por Lenin y Trotski: en los primeros congresos de la Internacional Comunista los debates entre diferentes organizaciones revolucionarias eran la práctica política cotidiana y los bolcheviques construían con los partidos marxistas la Revolución mundial. Si bien es cierto que desde 1959 Cuba no ha dejado de practicar el internacionalismo, esta idea ha terminado siendo monopolizada por la burocracia cubana.

Frente a esa burocracia que abre el camino a la restauración capitalista, en el contexto de la aguda crisis económica y política que hoy atraviesa Cuba y que tuvo su expresión en las manifestaciones del 11 de julio, comenzó a forjarse una izquierda crítica cubana cada vez más radicalizada, de la que Comunistas es una de sus expresiones. Esa izquierda crítica ha roto el monopolio del uso del internacionalismo al conectarse con múltiples organizaciones revolucionarias de otros países.

No es casual que las organizaciones marxistas solidarias con la izquierda crítica cubana sean trotskistas, como tampoco es casual que Comunistas haya sido el puente para este nuevo internacionalismo revolucionario. Tanto Trotski como el Che Guevara, denunciaron el traicionero y duro golpe que dio la burocracia soviética al internacionalismo y el socialismo. Ambos no solo se limitaron a la denuncia sino que intentaron desarrollar la lucha por la Revolución mundial. Ambos sintetizan la imbricación del pensamiento marxista bolchevique y el pensamiento marxista revolucionario cubano que en nuestra pequeña labor política hemos intentado aplicar desde Comunistas ¡Que los lazos entre Comunistas y la clase trabajadora argentina sean tan fuertes como los del Che con Cuba y tan sólidos como las ideas de Trotski!

La invitación para participar en vuestro congreso, al que no hemos podido asistir por trabas burocráticas, es un ejemplo del nuevo internacionalismo revolucionario naciente entre los trotskismos y la clase trabajadora cubana. Muchas gracias camaradas del Partido Obrero por habernos honrado con la invitación a vuestro congreso. Con esta invitación nos sentimos más comprometidos a continuar la lucha revolucionaria en Cuba y en cualquier lugar del mundo. Una nueva Internacional Comunista -que solo se podrá construir por encima de todo sectarismo- es una tarea urgente o el capitalismo destruirá a la humanidad.

Ni bloqueo imperialista ni restauración capitalista: ¡Patria socialista o muerte!

¡Hagamos dos, tres, muchas Revoluciones!

¡Viva el internacionalismo!

¡Viva la clase trabajadora argentina, cubana y mundial!

¡Hacia el Comunismo!

Comunistas – Cuba

 

“Compartimos la lucha por conquistar un partido revolucionario de la clase trabajadora”

Reciban desde México un combativo y afectuoso saludo del Grupo de Acción Revolucionaria y sus sectores de base, Juventud Revolucionaria y Rosas Rojas, para el presente congreso que desarrollan las y los compañeros del Partido Obrero en Argentina.

El escenario de guerra y confrontación económica ante la pérdida de hegemonía del imperialismo norteamericano frente a China, en que se lleva a cabo este XXVIII Congreso pone por delante las tareas de caracterización y acción de las y los revolucionarios en todo el mundo. Sin duda el PO es un ejemplo para las organizaciones socialistas a nivel internacional y por supuesto a nivel Latinoamérica.

En el continente americano los países semicoloniales como México y Argentina nos enfrentamos al imperialismo Yankee y sus administradores nacionales, aunque las masas trabajadoras han demostrado su enorme capacidad organizativa y de movilización, sin embargo las organizaciones revolucionarias no han podido conquistar la dirección de las mismas y la conformación de partidos revolucionarios que lleven adelante una transformación radical por medio de la toma del poder por las y los trabajadores.

Los diferentes gobiernos de corte nacionalista burgués, desde México hasta la Patagonia, no son capaces de romper con la subordinación de sus países con el imperialismo norteamericano, sólo aspiran a cabalgar la crisis económica sin trastocar las bases del neoliberalismo.

Si el día de hoy existe una nueva “Marea Rosa”, desde nuestra perspectiva en un tono más pálido, no se debe a que el programa nacionalista burgués triunfe sobre el neoliberalismo sino porque las masas aún no conquistan una dirección política propia, desde la clase trabajadora y ceden su dirección a pesar de poner de rodillas a gobiernos y regímenes que parecían inamovibles.

Sin duda, compartimos la lucha por conquistar un Partido Revolucionario de la clase trabajadora bajo las banderas de la cuarta internacional, de ahí que celebramos la gran importancia de la organización de las y los trabajadores que se reúnen en este congreso para conquistar un gobierno de los trabajadores y socialista.

Seguiremos de cerca los acuerdos de este congreso.

Luchar, vencer.

Grupo de Acción Revolucionaria (GAR) – México

 

“Defender a los miles de piqueteros que están agrupados en el Polo Obrero y en la Unidad Piquetera”

Los militantes y simpatizantes del Grupo Tribuna Classista, desde aquí en Brasil, queremos saludar la realización del XXVIII Congreso del Partido Obrero de Argentina, que se realizará entre el 17 y el 19/6.

La primera y más urgente tarea en este momento es defender a los miles de piqueteros que están agrupados y organizados en el Polo Obrero y en la Unidad Piquetera y que notoriamente están constituyendo en este momento la principal fuerza social y política del proletariado en oposición al hambre y a la miseria que se extiende por todo el país bajo la batuta del gobierno fondomonetarista de Alberto y Cristina Fernández.

Detrás de las acusaciones de carácter moral que actualmente pesan sobre el Partido Obrero y el Polo Obrero están los intereses materiales, tanto de los sectores más reaccionarios de la burguesía como incluso de los que se dicen nacionales y populares. En otras palabras, los intereses sociales y políticos de los trabajadores son puestos sobre el tapete en una polarización de clases frente a los intereses de la burguesía. El intento de la burguesía es impedir la organización independiente de los trabajadores y poner en marcha la intrusión del Estado burgués sobre ellos, el intento de una clase social que tiene sus intereses antagónicos de arbitrar y poner un límite a la organización y acción independiente de las más amplias masas contra el régimen político de rendición y hambre. En esta feroz lucha de clases, la burguesía desesperada no mide las consecuencias. No al intento de injerencia de los partidos estatales y burgueses en la organización política de los trabajadores. ¡Fuera las manos del Partido Obrero, del Polo Obrero y de las demás organizaciones de lucha obrera!

La propuesta de paro nacional y plan de lucha revela el papel que juega la burocracia de la CGT en Argentina, que corresponde al mismo papel que tiene la CUT y otras centrales sindicales que sustentan todo el régimen político en Brasil. La CUT y sus sindicatos de base deben romper con la burguesía, romper con la política de Bolsonaro de garantizar la gobernabilidad y convocar a la huelga general ante la erosión de las condiciones de vida de los trabajadores, asolados por la contracción salarial, el desempleo, el hambre, la miseria y todos los males que son consecuencias inevitables de la crisis capitalista.

El gobierno de Bolsonaro, ya en agonía, entregó Eletrobrás en bandeja y está siendo acusado de estar involucrado en el asesinato del funcionario e indigenista despedido de la Funai [Fundación Nacional del Indio], Bruno Pereira, y del periodista británico Dom Philips, desaparecidos desde el 5 de junio, en el Valle do Javari, extremo oeste del Estado de Amazonas, cuyos cuerpos fueron descuartizados e incinerados. Esto, poco después de que la Policía Federal de Carreteras, la niña de los ojos de su gobierno, hubiera asesinado en Umbaúba, en el interior del nororiental estado de Sergipe, con los métodos del nazismo, por asfixia e insuficiencia respiratoria, usando pimienta y gas lacrimógeno en el interior del baúl de un auto, del joven obrero Genivaldo de Jesús Santos. Fue entonces cuando el furgón policial se convirtió en una “cámara de gas”. Las acciones de violencia policial en las favelas de los grandes centros urbanos, donde vive y se concentra la mayor parte de la población pobre y negra del país, se han intensificado, al punto de caracterizarse como una política deliberada de exterminio político y social. ¡El apartheid está aquí!

Por otro lado, la única política de quienes dominan la CUT y la mayoría de los sindicatos de izquierda del país es “sangrar” o “deshidratar” al gobierno de Bolsonaro y esperar las elecciones de octubre de este año, mientras se desarrolla una guerra real de la burguesía contra los trabajadores, a través de su podrido régimen político en su conjunto.

La política del PT y los seguidistas del PT, como el Psol y su Federación con la Red, es ayudar a desconstituir el contenido de clase del gobierno de Bolsonaro, que es un gobierno de explotadores (banqueros, latifundios que se han convertido en agro-pop, industriales, la dirección de las Fuerzas Armadas, etc.) contra los explotados. La alianza de Lula con Alckmin [exgobernador del estado de San Pablo y exmiembro del PSDB] significa un intento de conciliar los intereses irreconciliables del proletariado y la burguesía y no es un mero problema electoral. Lo que está en juego es la vida de los trabajadores, por lo que es un tema vital. Quien pagó y está pagando el golpe de Estado de 2016, comiendo el pan que amasó el diablo, son las masas cada vez más empobrecidas. El persistente conciliacionismo de Lula y el PT es, en este momento, una medida de emergencia y prevención para sectores de la burguesía que temen una rebelión masiva ante la quiebra política del régimen bolsonarista.

La falacia de la polarización entre democracia y fascismo, en la forma de polarización entre la candidatura de Lula y Bolsonaro, es un intento y esfuerzo gigantesco e inútil de un sector de la burguesía por disfrazar su dominación de clase ante un escenario de quiebra total del régimen político en su conjunto frente a la crisis capitalista que se abrió en 2007/2008, agravada por la crisis pandémica que se convirtió en una tragedia humanitaria y ahora exponencialmente incrementada con la guerra imperialista en Ucrania, que fue provocada por las insalvables contradicciones del sistema capitalista mundial en su etapa senil, de caducidad, esa etapa que se abrió, según Lenin, a principios del siglo pasado, de guerras y revoluciones.

La guerra imperialista exige una intervención internacionalista de las masas proletarias en todo el mundo y de sus organizaciones independientes para luchar por ponerle fin lo más pronto posible y con todas sus fuerzas para aprovechar la gigantesca crisis capitalista mundial que provoca una enorme inestabilidad en sus regímenes políticos para “agitar entre las capas más profundas del pueblo y precipitar el derrocamiento de la dominación capitalista” (Lenin y Rosa de Luxemburgo, Congreso Internacional Socialista, Stuttgar, Alemania, 1907), es decir, precipitar el derrocamiento de los gobiernos capitalistas en el mundo entero, siguiendo la máxima de que “nuestros enemigos están dentro”.

Abajo la guerra imperialista.
Por la unidad del proletariado ruso y ucraniano y de toda Europa del Este para derrotar al imperialismo y a las oligarquías políticas restauracionistas. Por gobiernos obreros y la unidad socialista de Europa.
No a la persecución y el macartismo contra el Partido Obrero, el Polo Obrero y otras organizaciones de trabajadores.
Por gobiernos obreros y la unidad socialista de América Latina.

Tribuna Classista – Brasil

 

“Viva la independencia política de la clase trabajadora”

La agrupación brasilera Política Revolucionaria le envía un saludo especial al Congreso del Partido Obrero de Argentina. Sabemos que este tipo de prácticas de estudio y debate interno son fundamentales para el crecimiento de la comprensión necesaria para orientar las tareas políticas para toda una nueva etapa que se abre para la lucha de la clase obrera en todo el mundo. Viva la independencia política de la clase trabajadora. Viva la revolución socialista.

Política Revolucionaria – Brasil