Semana internacional

La banca mundial: más que nubarrones


El semanario The Economist (21/2) dedicó su atención, la semana pasada, a "la tormenta que viene" sobre el sistema bancario internacional. Dice: la situación "es similar" a las crisis financieras de 1997-99 (Sudeste asiático, Rusia, LTCM de Estados Unidos). "La razón es muy simple: las ganancias han caído tan rápido como se extendieron los mercados y, en consecuencia, los bancos tienen que arriesgar más dinero propio para seguir generando beneficios; pero el monto que han aplicado en los últimos meses es ya demasiado preocupante." El esquema de negocios del sistema bancario se caracteriza por los préstamos de dudoso retorno y la creciente insuficiencia de los sofisticados "modelos de riesgo", que "subestiman" completamente los problemas derivados de los "grandes shocks, cuando todo el mundo busca salir al mismo tiempo" de los mercados que se derrumban.


 


Las tres crisis de Alemania


El diario español El País (15/2) describe "el declive del motor económico de Europa (Alemania), sobresaltado con continuos escándalos de corrupción políticos y económicos". Los escándalos incluyen negociados en las contrataciones estatales, financiamiento ilegal de los principales partidos políticos, fraudes empresarios recontramillonarios… y las coimas respectivas, que involucran tanto a los principales dirigentes de la derecha como al SPD en el poder. El socialdemócrata Schröeder "está sumido en una confusión absoluta". Uno de los periodistas más conocidos, a su vez, caracteriza a Alemania, en un libro reciente, como una "república bananera(…) donde la corrupción se extiende como una metástasis".


Ocurre que "la crisis es estructural, con niveles de desocupación y economía sumergida desconocidos". La cifra de desocupados se mueve en torno a los 4,5 millones, pero no se incluyen aquí los que participan de cursos de formación profesional. Al mismo tiempo "funciona a toda máquina la llamada Suiza de los pobres, el trabajo en negro que no cotiza al fisco ni a la seguridad social". La ampulosa propuesta de reformas del jefe de gobierno para reencarrilar a la Alemania capitalista en los próximos años (la llamada Agenda 2010) es "una misión imposible", concluye el medio madrileño.


 


Bolsas europeas: la peor caída


La gran caída bursátil del martes 24 pasado fue provocada, según Financial Times (21/2), por los grandes grupos empresarios y los datos que revelan la fragilidad de la economía europea. Dos corporaciones de la industria química (la suiza Clariant y la francesa Rhodia) denunciaron problemas financieros derivados del aumento del precio del petróleo y una baja de la demanda del sector farmaceútico y de la industria automovilística (lo cual pone de relieve el estancamiento más general del consumo). Problemas similares anunció el segundo banco de Alemania (del gupo HVB), en tanto que un alto ejecutivo del Deutsche Bank planteó la perspectiva de un agravamiento de los problemas si la liquidez (abundancia de dinero barato) que caracteriza a los mercados financieros es afectada por un aumento en los intereses de los EE.UU. El banquero teutón también está inquieto por "la tomenta que viene".


 


El "zar" Putin


El presidente ruso, Vladimir Putin, disolvió todo su gabinete el 24 de febrero. De acuerdo al Moscow Times, "los desacuerdos entre Putin y su primer ministro Kassianov llegaron a un punto límite cuando el último se negó a incrementar los impuestos a los monopolios del petróleo", lo cual equivale a un segundo acto en la crisis abierta a fines del año pasado, cuando Putin detuvo a Mijail Jordorkovsky, principal accionista de Yukkos, el gigante petrolero ruso. Entonces señalamos que la crisis estaba "directamente ligada a la redistribución de los activos rusos y a la participación en ella del capital financiero internacional" (PO, 6/11/03). El régimen ruso se ha transformado en una especie de bonapartismo. "Las instituciones y los políticos que podían asumir un papel independiente se acomodan y, en parte, se diluyen en el sistema piramidal cuyo vértice es Putin" (El País, 16/2).


 


¿Cerco sobre Bin Laden? (La CIA en problemas)


Detrás de la desmentida información del último fin de semana sobre la detención del "hombre más buscado del planeta" hay mucho más que un falso rumor. La semana pasada, George Tenet, director de la CIA, realizó una visita secreta a Paquistán con el propósito de concluir "conversaciones con los servicios de inteligencia paquistaníes que sentarían la base de operaciones antiterroristas para cazar a miembros de Al Qaeda" (Financial Times, 22/2). Dos días después, el mismo diario indicaba que "diplomáticos occidentales señalaron que el gobierno de Paquistán había acordado en proceder a arrestar a militantes del grupo Al Qaeda (incluidos miembros de la resistencia afgana) o, alternativamente, a forzarlos a introducirse en el fronterizo Afganistán para que sean perseguidos por las tropas yanquis". De todos modos, no está claro si la cacería de Bin Laden es un operativo "inflado" de Bush para repuntar en la campaña electoral interna. Según Los Angeles Times (22/2), la CIA necesita resultados luego de fracasos reiterados en Irak y Afganistán y de crecientes dificultades para avanzar con las tareas de espionaje en el mundo árabe.


 


Huelgas (con piquetes)


Un tercio de los trabajadores de la Compañía Nacional de Ferrocarriles de Canadá inició una huelga el pasado viernes 21, que puede afectar seriamente el transporte de cargas (Wall Street Journal, 23/2). Los trabajadores rechazan la irrisoria oferta patronal de un 3% anual de aumento salarial para el próximo trienio.


También en España la discusión del salario y del convenio ha puesto en pie a los trabajadores, en este caso de la construcción naval. "Las protestas de astilleros se extienden y radicalizan por varias comunidades (Cadiz, Sevilla, Ferrol y Sestao)" (El País, 13/2). En Cadiz y Sestao los trabajadores cortaron rutas y el tráfico ferroviario y enfrentaron la represión policial. El comité de empresa de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea convocó a siete jornadas de huelga para marzo y abril para protestar contra un plan de "tercerización" de tareas y despidos.


Finalmente y con mayor alcance, los trabajadores italianos de la empresa Alitalia convocaron a un paro general para el viernes 5 de marzo, contra los planes de reducción de personal. El paro fue anunciado junto a la convocatoria de una manifestación nacional que se hará en Roma.