Una “Reforma Educativa” clerical

Uno de los puntos neurálgicos de la “Reforma Educativa” boliviana (en realidad, del Banco Mundial) es su carácter clerical.


Efectivamente, en su artículo 57, establece que “en los establecimientos fiscales (estatales) y privados no confesionales se impartirá la religión católica; y en los privados confesionales, la religión acorde con su naturaleza confesional …”. En ninguna de las declaraciones de la Cob se repudia el carácter clerical de la nueva ley.


La denuncia viene al caso, también, porque la Iglesia se ha autoerigido —con el aval del gobierno y la burocracia de los sindicatos— en la “mediadora” entre los docentes y las autoridades.


La curia pretende imponer “por las buenas” lo que el gobierno no ha podido imponer “por las malas”: el levantamiento de la huelga docente, la derrota de los maestros y la aplicación de la “Reforma”. Por eso su primera acción de “mediación” consistió en un llamamiento a los sindicatos docentes a “negociar sin presiones” … es decir, sin huelga.