Una secta hiper-cretina

La zorra y las uvas, again and again

Como ya fueron informados los lectores de Prensa Obrera, a mediados de setiembre fue realizado un importante simposio académico-político en Brasil sobre “La Izquierda en América Latina” (historia, presente, perspectivas), en la Universidad de San Pablo (USP). La Verdad Obrera, periódico del PTS argentino, juzgó oportuno referirse al mismo a través de un medio inusitado; a saber, reproduciendo in extenso las consideraciones al respecto de un ignoto grupúsculo brasileño que sería su “organización hermana”.


Las consideraciones del grupejo incurren en notorias deformaciones, que el PTS platino reproduce como propias. Califica pedantemente al simposio como un evento de “intelectuales académicos”, no sólo ignorando la participación de numerosos militantes, sino también que muchos de esos “intelectuales” son también militantes políticos y sociales, que padecieron persecuciones, prisiones y torturas, que son autores de obras referenciales en sus áreas de trabajo, que se sentaron a discutir en mesas redondas, en igualdad de condiciones, con jóvenes estudiantes de posgrado casi sin trayectoria, sin exigir privilegios ni tratamiento diferenciado.


El simposio fue realizado con escaso apoyo institucional (y el que se obtuvo fue producto de una lucha política en el interior de esa institución) debido a que la USP está comandada por una rectoría y un elenco académico notoriamente derechista, hecho que el PTS probablemente ignora (o peor, lo que no sería extraño, desprecia). El Jornal da USP, periódico oficial de la universidad, notificado del evento, ni dio noticia del mismo. Sin entrar en detalles, el libelo asumido por el PTS desprecia visiblemente tanto el esfuerzo por realizar el evento en esas condiciones, como también a sus más de dos centenas de participantes (que, claro, entendían de sobra esas condiciones y por eso estaban allí) los que habrían sido agrupados en una “infinidad de mesas de discusión” (sic), de las que sólo se habrían destacado dos (con la participación de dirigentes del PO). Pedantería y caradurismo.


Los calumniadores decidieron ignorar, por ejemplo, que el simposio fue oficialmente abierto, no por las autoridades universitarias (como es habitual), sino por la anciana profesora emérita de la USP, notoriamente marxista, Emilia Viotti da Costa, sin lugar a dudas la principal historiadora viva del Brasil (y, en mi opinión, y no sólo la mía, la más importante historiadora del país, a secas) perseguida y demitida de la USP por la dictadura militar de 1964, después importante profesora de Historia latinoamericana en la Universidad de Yale (Estados Unidos), donde encontró acogida y refugio, autora de una vasta obra sobre Historia brasileña y latinoamericana (que es referencia mundial), readmitida y declarada docente emérita de la USP por una fuerte lucha política realizada en la universidad.


Con gran esfuerzo y escasez de medios, el simposio reunió intelectuales y militantes de una decena de países, además de parte sustancial de la intelectualidad y la dirigencia de izquierda de Brasil. Por si hace falta aclararlo (con cretinos nunca se sabe), nadie recibió un centavo por su presencia. Estuvo presente el principal dirigente de la oposición anti-golpista paraguaya, Ricardo Canese, ex candidato presidencial, y rindió cuenta de su lucha. Para el PTS and Bros., todo eso es verdurita. El PTS (a través de sus corresponsales brasileños) se queja también de la presencia de dirigentes de la izquierda del PT, como si éste no fuera, hasta hoy, la principal experiencia de la izquierda brasileña y aún tiene un rol dominante en el movimiento sindical. Se queja hasta de la presencia de intelectuales vinculados, actualmente o en el pasado, con el PCB, despreciándolos (pero no identificándolos o nombrándolos explícitamente, como cabe a perfectos cagones) e ignorando (dentro de su océano de ignorancias) el papel de ese partido en la historia del Brasil, desde su origen con la III Internacional hasta su conversión en stalinista: desde luego, esa cuestión clave fue tema de una de las mesas del simposio, como no podía dejar de serlo.


Participaron también dirigentes sindicales de Brasil, de corrientes políticas o sindicales diversas. Algunos dirigentes de la huelga nacional de los estatales federales no pudieron participar, exactamente por encontrarse en actividades dirigentes en esa huelga. El papel higiénico del PTS, made in Brazil, se queja de la ausencia de un sindicato local (con el que el autor de estas líneas, además de otros organizadores del simposio, milita hace casi tres décadas, y por cuyos militantes salió -salimos- en defensa pública en numerosas ocasiones, como lo sabe toda la USP), sindicato que divulgó, por otro lado, ampliamente el simposio. Los dirigentes políticos y/o sindicales presentes, por otro lado, fueron todos invitados a título personal, como es práctica habitual en actividades académicas.


Los autores de la nota de marras (poco importa quién la firma o le dio redacción final), sin embargo, llegan al colmo de calificar como la principal “debilidad” del simposio la ausencia… del PTS. Como ya quedó claro, el PTS como tal (como organización), no sería invitado, como no lo fue ninguna organización. Su ausencia, por otro lado, no fue notada por nadie. Mencionan, de pasada y elogiosamente, la presencia como expositor en el simposio del profesor y militante brasiliense (de Brasilia) Gilson Dantas (mi amigo personal, y de algunos dirigentes del PO, por otro lado), miembro de la sucursal brasileña del PTS, lo que demuestra que no hubo ninguna exclusión política. El veterano Gilson Dantas, notorio autor de libros, que también publica su propia revista (de cuyo Consejo de Redacción soy miembro, junto a más de una veintena de “intelectuales académicos”), si no es representativo de la secta supuestamente “excluida”, sería mejor que se lo dijesen.


Lo que se dijo en la mesa redonda final del evento, en un Anfiteatro de Historia en el que no cabía un alfiler, con la participación de Jorge Altamira (PO), Plinio de Arruda Sampaio (PSOL), Valter Pomar (PT) y Ricardo Canese (Frente Guazú), será dado a conocer a los lectores argentinos en En Defensa del Marxismo, anuncio que nos ahorra comentar la pseudo-transcripción, más que mentirosa, grotesca, de los corresponsales-papagayos, al igual que el video de la misma.


Para concluir, el PTS remata su retahíla de sandeces con una calumnia. En efecto, afirma que el simposio de la USP no sería otra cosa que una “reunión internacionalista” previamente anunciada por el PO, que, fracasada, se habría transformado en un coloquio académico. El “coloquio” de la USP fue anunciado públicamente desde hace casi un año (desde luego, desvinculado de cualquier “reunión internacionalista” del PO o la CRCI). Lo que el PO hizo fue anunciar que aprovecharía la presencia de algunos de sus dirigentes en el mismo para realizar una reunión internacionalista en Brasil. Para dicha reunión preparó y divulgó un texto programático. La reunión fue realizada (obviamente fuera, espacial y temporalmente, del simposio), con militantes de cuatro países, que discutieron y enriquecieron dicho texto, como será dado a conocer. Ya dimos cuenta de esto en un artículo publicado en edición precedente de Prensa Obrera, o sea que el PTS lo sabía.


El PO, que no es una secta auto-satisfecha, analizó el impasse político de su organización internacional, la CRCI, a la cual exige acciones de envergadura, a la altura de la bancarrota capitalista y la movilización de las masas del mundo. EL PTS, una secta auto-satisfecha, no admite ni analiza nada, porque su impasse es de otro orden. Osvaldo Coggiola